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La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) anunció hace unos días que Cantabria vivió un octubre «extremadamente cálido y muy seco». La imagen de estos días de la cascada del Tobazo, en Valderredible, bien podría haber ilustrado aquel informe de la Aemet. Está seca, no hay ... agua que resbale por la pared rocosa y hay un inusual silencio en la zona que llama la atención de los vecinos, alguno incluso asegura que «nunca la había visto así».
Las cascada, con una de las caídas de agua más importantes de Cantabria, se ubica en las Hoces del Ebro y en su descripción 'turística' suele venir acompañada de la frase: «Un espectáculo para todos los sentidos». Sin embargo, el oído, en esta ocasión, no goza del ruido del agua al caer, como muestra el vídeo de abajo, grabado este pasado jueves. La vista, evidentemente, tampoco queda satisfecha.
Hay un silencio que solo se rompe con los pasos del autor del vídeo grabado ayer en la misma zona donde, en los meses más secos, los de verano, cientos de personas se refrescan de las elevadas temperaturas.
La cascada del Tobazo es un lugar de habitual peregrinaje porque se ubica a tan solo diez minutos andando del pueblo de Villaescusa de Ebro. Es una ruta sencilla, adaptada para todo tipo de público, expertos y no expertos. Verlo cargado de agua, como muestra el siguiente vídeo, grabado el año pasado por estas fechas, sí que es un espectáculo para todos los sentidos.
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