Borrar
Los ríos. Así bajaba esta semana el Híjar, cuyo cauce ha sido limpiado, tras las últimas lluvias y tormentas. fotografías Ernesto Sardina
Cuando llueve sobre mojado

Cuando llueve sobre mojado

Comarcas: Campoo ·

La pandemia del coronavirus supone un duro revés para una comarca que empezaba a recuperarse de las riadas de 2019

Ernesto Sardina

Santander

Lunes, 20 de abril 2020, 07:08

En el sur de Cantabria, en la comarca campurriana, llueve sobre mojado y la crisis del coronavirus viene a sumarse a los efectos de las riadas que marcaron el inicio del 2019 y especialmente su culminación en diciembre, cuando las aguas del Híjar, del Ebro y del Izarilla se desbordaron e irrumpieron en varios barrios de Reinosa y Matamorosa, llegando incluso a anegar parte de Cañeda después de evacuar el agua a través del túnel de la línea ferroviaria. Y es que ya dicen que las desgracias no vienen solas, y cuando el esfuerzo y la solidaridad de los campurrianos habían permitido cierta recuperación, ahora el coronavirus, el estado de alarma y el confinamiento han caído como un jarro de agua fría sobre una economía maltrecha, mayormente industrializada –que tampoco se encuentra en su mejor momento–, pero en la que también tiene un importante peso el sector primario, que ha seguido trabajando, y el de servicios.

Los comerciantes y pequeños empresarios, toda la restauración y aquellos que viven del turismo han visto como sus proyecciones económicas se paraban en seco, teniendo que asumir además un panorama de máxima incertidumbre y que asume además una temporada de nieve más bien floja por la falta precipitaciones.

Estos sectores reclaman apoyo, medidas ambiciosas, condonaciones de tasas e impuestos y máximo respaldo económico y administrativo para reflotar esta economía local.

Al tiempo, los ayuntamientos campurrianos se afanan en mantener los servicios básicos, atender a los vecinos más vulnerables y ofrecer cierta cercanía mediante la atención personalizada, la entrega de los deberes o el material escolar a quienes no pueden acceder a las tecnologías, o la celebración de cumpleaños.

También se están volcando en la adquisición de mascarillas con las que reforzar la seguridad de los vecinos, al tiempo que la actividad política se ha reducido a la mínima expresión, en la mayoría de los casos a presentar medidas que puedan paliar los efectos de esta pandemia.

Y es que si bien la comarca campurriana no es una de las más castigadas por el Covid-19, registra más de un centenar de casos confirmados y acumula también más de una decena de fallecidos.

Principales focos

Dos son los principales focos: Reinosa y Santiurde de Reinosa. En el caso de la capital campurriana, con medio centenar de positivos, el crecimiento de los contagios se habría estabilizado hace días, mientras que el de Santiurde de Reinosa ha experimentado un fuerte crecimiento en las últimas semanas; la explicación se encuentra en la residencia de Lantueno, que asume el cien por cien de los positivos (más de 40).

Y es que la preocupación en la Merindad de Campoo también está puesta en las residencias. Su incidencia se centra en la de Lantueno, aunque ya se habría detectado algún positivo en las de Reinosa. Ahora, los esfuerzos del personal se centran en mantener a cero los registros de las residencias de Mataporquera y Polientes, al tiempo que se trabaja en tratamientos más específicos y en test rápidos para controlar y aplanar la epidemia en el resto de las residencias.

Otra de las preocupaciones, que está vinculada a los aspectos sanitarios de esta pandemia es el movimiento de personas que se habría detectado en municipios más rurales, con segundas residencias. Especialmente sería el caso de Valderredible, donde su alcalde, Fernando Fernández, remitió la pasada semana un escrito al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, al presidente de Cantabria y a la delegada del Gobierno para solicitar que se retorne a aquellos «irresponsables» que procedentes del País Vasco, Madrid o Santander acuden a Valderredible y se saltan el estado de alarma. Por lo menos, señalaba el regidor valluco, «solicitamos que se les someta a una cuarentena».

La respuesta llegó desde la Delegación del Gobierno. Ainoa Quiñones afirma que la Guardia Civil está actuando en el municipio «conforme a la ley vigente, imponiendo sanciones cuando corresponde», y que decretar una cuarentena es «competencia de las autoridades sanitarias», mientras que el retorno «sólo podría ser autorizado por organismos judiciales».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

eldiariomontanes Cuando llueve sobre mojado