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La Mesa de Movilidad del Besaya ponía de manifiesto esta semana «el abandono» por parte de Renfe y Adif de las instalaciones de la red de Cercanías, en la línea que une Torrelavega con Reinosa. El colectivo de usuarios del transporte público ha ... elaborado un documento que recoge los numerosos desperfectos en las estaciones y apeaderos que componen la línea entre estas dos cabeceras de comarca, exigiendo «un mantenimiento digno» de las mismas.
Dolores Póliz es usuaria de tren. Suele cogerlo en Torrelavega y bajarse en Las Fraguas. Como tantos otros viajeros de la cuestionada línea considera que el estado de las estaciones «deja mucho que desear» e incluso «en algunas da hasta miedo bajarse de noche», describe a preguntas de este periódico.
Es precisamente sobre la infraestructura ferroviaria en la línea Reinosa-Santander, y singularmente, en el corredor del Besaya, entre Torrelavega y la capital campurriana, donde ha centrado la atención la Mesa de Movilidad de Movilidad del Besaya esta semana, que ha elaborado un dossier que reúne las protestas de usuarios como Dolores. En el documento se enumeran desperfectos sin reparar desde hace años que, como explica el presidente de la Mesa, Javier Polanco, «contribuyen a deteriorar la imagen del transporte público y dificultan la movilidad cotidiana de los usuarios de una infraestructura vital para conectar los valles de Buelna e Iguña», resume.
Especial atención merece para el colectivo el estado de estaciones de la importancia de Los Corrales o Reinosa, que no cuentan ya con oficina de atención al viajero, a pesar de que tienen servicios de trenes regionales y de grandes líneas. «En el caso de Los Corrales, no tiene ni un triste aseo para aliviar las urgencias de los usuarios», critican.
Por otro lado, denuncian los problemas de accesibilidad en casos como los apeaderos de Las Fraguas y Molledo-Portolín, dos estaciones con un avanzado estado de deterioro, donde hay largas escaleras o aceras sin rampa. En el apeadero de Pesquera y Las Fraguas las canceladoras están rotas y en Lantueno ni siquiera hay máquina expendedora de billetes. En cuanto al deterioro de las diversas estaciones, recuerdan el alto valor patrimonial que poseen algunas de ellas y enumeran su deterioro con peligro para los usuarios.
Al mismo tiempo, afirman que hay otros edificios auxiliares como almacenes y talleres que han perdido su función y que «podrían rehabilitarse y destinarse a otros usos por parte de Renfe o los ayuntamientos donde se encuentran, proponen.
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