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En el transcurso de un mes, más o menos, el Ayuntamiento de Reinosa ha celebrado hasta tres plenos seguidos y los últimos dos han sido ... algo broncos, con expulsión de ediles incluidos. El deeste miércoles, aunque nadie le esperaba ya dadas las fechas, fue algo más suave y con marcado acento electoral. Durante la sesión se debatió una modificación de créditos por valor de 350.000 euros para amortizar un crédito que se solicitó en 2021 para hacer obras por importe de 2,5 millones. La medida se aprobó por unanimidad, ya que supone aminorar la alta carga de intereses por el aumento de la tasa del Euribor, no obstante, pese al acuerdo unánime, hubo un pequeño roce y argumentos encontrados entre el PRC y Reinosa en Común.
En su intervención, el alcalde de Reinosa, José Miguel Barrio, defendió la bondad de la modificación de créditos para «reducir el endeudamiento». «No queríamos hipotecar ya a la siguiente Corporación», explicaba el alcalde, que contextualizaba la medida en la subida de los tipos de interés que viene impuesta por el Banco Central Europeo para frenar la inflación y, como consecuencia de una causa sobrevenida como es la guerra de Ucrania. «Cuando pedimos ese préstamo lo hicimos en unas condiciones óptimas», explicaba Barrio recordando el aval técnico de la medida y el «estricto cumplimiento del principio de prudencia financiera» que tenía la misma. A la par, apuntó la que, a su juicio, era una buena herencia económica para la próxima Corporación. «Tenemos cinco millones en los bancos más dos millones de remanente de tesorería, todo esto nos permite sacar pecho de la gestión y atacar la incertidumbre económica mundial... o reducir considerablemente el endeudamiento», relataba, concluyendo que la legislatura había acabado «con los deberes bien hechos y con nota».
La concejal de Reinosa en Común (REC), Victoria Callejo, no estuvo de acuerdo con la valoración de Barrio. Por eso le dijo al regidor que se había quedado «ojiplática» al escuchar una cosa y la contraria. «No doy crédito como se puede hablar de la situación inmejorable del Ayuntamiento de Reinosa y luego decir, acto seguido, que tenemos una deuda», señaló. La edil tiró de cifras contrarias sacando a relucir los datos de Hacienda sobre la deuda viva municipal. «Tenemos una deuda viva de 3,3 millones de euros, eso significa unos 400 euros por habitante, no sé de que nos está hablando, no es para sacar pecho», le espetó, tras criticar que el crédito solicitado para obras se gastó en un proyecto que ha generado «cero empleo y cero en fijar población». El regidor le acusó de sacar siempre «su panfleto» a relucir.
Por su parte, el portavoz del PSOE, Sergio Balbontín coincidió con REC en que se trata de unos datos que no eran «como para sacar pecho», aunque compartió con el alcalde que ellos sí hubiesen recurrido a un crédito, pero para distintos proyectos de los planteados por PRC y PP. «Estoy de acuerdo en que tenemos visiones diferentes de hacer las cosas», afirmó, señalando que los socialistas hubieran apostado, tras la pandemia, por proyectos generadores de «empleo o a fijar población».
Cabe recordar que Reinosa concurrió a ese crédito en 2021 por las condiciones «ventajosas» de aquel momento para ejecutar varias inversiones que tenía el indice del Euribor. En la 'chuleta', Barrio –consciente de que era su último Pleno y que el domingo hay elecciones– llevaba lo que se había hecho con ese dinero. Por ejemplo, concurrir a las convocatorias de subvenciones regionales y europeas que conllevan una cofinanciación. También «actuaciones relevantes como la tercera fase del saneamiento de la calle Carlos III, la rehabilitación de la Casuca de la Ascensión o de las piscinas cubiertas...», relató.
Atención a domicilio
En el Pleno, los ediles también aprobaron por unanimidad desestimar la solicitud efectuada por la empresa Carflor, en proceso de liquidación, y actual contratista de la atención a domicilio. En la misma, la empresa pedía que autorizase la cesión del contrato a la empresa BCM Gestión de Servicios S.L. La medida se rechazó porque el pliego no contempla la posibilidad de cesión. Asimismo, el alcalde se solidarizó con los trabajadores y aseguró que estos estaban cobrando la nómina, gracias al pago que hace el ayuntamiento al administrador concursal.
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