Otro susto en la calle Quintanal de Reinosa afectada por los problemas de hundimientos

«Esta semana empezaron a proyectar el hormigón en el bloque de al lado, y el jueves ya detectamos una pequeña grieta pero hoy a las siete de la tarde ya no se podía estar aquí, el techo se desplomaba», explicaba Alexandra Fernández, dueña del local hostelero La Flor a preguntas de El Diario Montañés. Con el susto en el cuerpo, la mujer comenzó a llamar a todo el mundo para avisar a los servicios de emergencias. Hasta allí se acercaron los bomberos, la Guardia Civil y Policía Local además de varios concejales del Ayuntamiento.

Alexandra, muy asustada aún por lo que pueda pasar, explicó que, de momento, había mucha incertidumbre: «No sabemos qué va a pasar, nos están desarmando el techo». Viven del bar ella, los empleados y algunos familiares y sin cocina «no podemos dar las cenas y damos muchas», añadía preocupada.

Uno de los primeros en llegar a la zona fue el concejal socialista Sergio Balbontín, que avisó a su vez al edil del equipo de Gobierno, José Luis López. Al poco también se acercó por allí el portavoz municipal del PRC y edil de Deportes y Festejos, Daniel Santos. Fue este último quien explicó a El Diario que pese a lo «aparatoso» del incidente, «el edificio y la estructura no tienen ningún problema y no habrá que desalojarlo».

Lo comentó tras haber hablado con el técnico municipal que había visitado la zona, muy sensible por el problema de hundimientos previos. Afirmó que «había las mismas grietas» que ahora. El edil trasladó que el desplome de un falso techo del bar si podría estar relacionado con las obras para inyectar hormigón y estabilizar el inmueble que está haciendo «un privado», dijo, apresurándose a aclarar que no era el Ayuntamiento. Y es que esta zona de edificios es la que cuenta con una sentencia favorable a los vecinos por los daños que registraron sus viviendas a raíz de la obra de reforma de las redes de saneamiento y abastecimiento. En este caso, los afectados recibieron una indemnización y era el promotor del inmueble quien estaba proyectando el hormigón.

Por ello, puede que las «vibraciones» hayan «afectado» a esta parte del bar donde «hay una zona más débil de materiales y una uralita», incidía el edil, en base a los primeros datos que le trasladaban los técnicos.