Desde que comenzara su andadura el 11 de mayo de 1997 han sido numerosas y muy variadas las intervenciones que ha realizado DYA Cantabria en Castro Urdiales y Guriezo. Tanto por tierra como por mar (también se hace cargo del servicio de socorrismo y ... salvamento en las playas castreñas), este colectivo ha intervenido en la práctica totalidad de los accidentes o sucesos en los que algún vecino o visitante se ha visto implicado. En la mayoría de ocasiones han sido los primeros en llegar al lugar de los hechos y los castreños lo saben.
Pero la pandemia que está asolando a todo el mundo también les está afectando a ellos, tanto que desde hace unos meses han tenido que dejar de prestar su servicios nocturno. Es decir, que ya no están a disposición de la ciudadanía las 24 horas del día como lo han hecho desde sus orígenes.
El motivo de este «recorte» en el servicio tiene que ver con su situación económica, que dista muchos de ser la deseada. Y es que este colectivo no solo vive de sus intervenciones en Castro y Guriezo, sino que, a lo largo del año, trabaja en otros municipios de la región prestando sus servicios sanitarios, como, por ejemplo, las Encerronas de Ampuero, o algunas pruebas deportivas. Eventos que este año no se han celebrado, con lo que sus ingresos se han visto mermados de forma considerable. «Los ingresos que obtenemos con esas intervenciones los invertimos en el propio servicio», cuenta Rafael Gómez, responsable de DYA Cantabria.
El pasado jueves, el Ayuntamiento de Castro anunció que este colectivo ha obtenido 90.000 euros de subvención -correspondiente al año 2020- con el objetivo de sostener su actividad en apoyo de Emergencias y Protección Civil, «persiguiendo el objetivo último de fomentar una mayor protección para la ciudadanía de Castro Urdiales, así como colaborar en la promoción del voluntariado que participa en las tareas de protección civil». El equipo de gobierno «valora positivamente» la trayectoria del colectivo, pero esta aportación -que se desglosa en los 60.000 euros que recibe otros años más otros 30.000 extras del 2020 por la pandemia- no llega a los cerca 180.000 euros que el colectivo necesitaría para poder desempeñar sus funciones las 24 horas del día. «Agradecemos la subvención del Ayuntamiento para poder prestar el servicio de 12 horas al día, pero nos gustaría alcanzar el presupuesto necesario para ampliar el servicio a 24 horas», añade Gómez.
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