Castro pide a Urbanismo que lleve a la Crotu los expedientes pendientes de autorización

Desde la Concejalía de Urbanismo, capitaneada por el socialista Alejandro Fernández, aseguraron que llevan reclamando a Gómez Blanco desde el mes de febrero que se lleven todos los expedientes de Castro Urdiales que están completos y que requieren el visto bueno de la Crotu.

Se trata de expedientes privados, algunos de las juntas vecinales y otros del propio Ayuntamiento, que «injustificadamente», según el Consistorio, no se llevan dentro del orden del día de la Ponencia Técnica, primero, y de la Crotu, después; «a pesar de estar preparados para llevarse». Documentación que, en casi todos los casos, se ha remitido hace más de seis meses. El Ayuntamiento ha querido hacer pública esta situación para ponerlo en conocimiento de los afectados y de «todos aquellos que llaman preguntando por sus expedientes al departamento de Urbanismo y no entienden cómo siguen sin contestar desde la Dirección General de Urbanismo».

Además de la afección a intereses privados, desde la entidad local critican que este retraso provoca también perjuicios a las instituciones públicas como las juntas vecinales y el propio Ayuntamiento de Castro, llegando a poder afectar a subvenciones conseguidas, como los proyectos de carril bici de Sámano y Allendelagua.

Por ello, el concejal de Urbanismo volvió a reclamar ayer al director general de Urbanismo que «una vez que no ha llevado los expedientes solicitados por el Ayuntamiento y por el representante de la Federación de Municipios de Cantabria a las sesiones de la Crotu de febrero ni de marzo», los lleve a la de abril, junto con todos aquellos que se sigan enviando y completando.

Además, apeló a la colaboración entre administraciones y reprochó que «ni este Ayuntamiento ni ningún otro se merece que se bloqueen o retrasen sus expedientes sin ninguna razón objetiva». En este sentido, apuntaron a la diferencia de siglas políticas, siendo el PRC quien dirige la Dirección General de Urbanismo y el PSOE quien gobierna en Castro Urdiales. «Algo que nunca debería afectar el buen funcionamiento de las administraciones públicas y el servicio que debemos prestar a la ciudadanía», lamentaron.