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Si el resultado de la actuación es el deseado, el vial que une las localidades de Lusa y Mioño, en Castro de Urdiales, no volverá a inundarse. Tampoco los garajes de las viviendas a los que iba a parar el agua sin canalizar que bajaba de las parcelas rústicas. El Ayuntamiento castreño ha llevado a cabo la mejora de la red de drenaje del camino, con el objetivo de evitar la acumulación de las aguas pluviales y su impacto en el firme.
La zona más urbana del tramo sufría «encharcamientos frecuentes y se formaban grandes balsas de agua», según concretó la alcaldesa, Susana Herrán, «lo que ocasionaba problemas de seguridad vial». Las inundaciones evidenciaban que el colector de aguas pluviales y los elementos de recogida existentes en la zona resultaban insuficientes, por lo que «la intervención que se ha ejecutado era prioritaria». Más allá del área urbana, el agua terminaba por acumularse en los puntos bajos del vial, que, como añadido, no disponía de una pendiente adecuada que permitiese concentrar el agua para su posterior recogida. Las obras han consistido en sustituir el actual colector de la localidad de Lusa por un nuevo elemento de PVC de 400 milímetros de diámetro.
Además, en la zona del campo de fútbol de Mioño, dadas las características del terreno, «se ha proyectado una zanja drenante», que a su vez comunica con un segundo colector en la margen izquierda del vial. Paralelamente, se ha drenado también en el área de la cuneta junto a las parcelas rústicas, lo que permitirá ampliar el espacio disponible en esa calle. La actuación se ha diseñado de tal manera que «se ha logrado el ancho suficiente para complementar la ejecución con un carril bici separativo, que vaya dando continuidad a la vía verde que une Castro y Traslaviña», concretó la regidora. Esta última es una vía peatonal muy transitada, que discurre por el trazado del antiguo ferrocarril. Una zona verde alejada del entorno urbano para disfrute de vecinos y visitantes, donde se encajaría este carril bici. En el mismo punto, hace tres años ya se reforzó el firme con material granular compactado, «con el fin de lograr que el agua de lluvia cayera de la forma adecuada y evitar la formación de charcos».
Herrán recordó que con esta obra «se ha buscado atender las peticiones de los vecinos de la zona, que en su momento, ya emitieron quejas por el mal estado de los viales, lo que el Consistorio resolvió mediante la renovación de la primera fase de asfaltados en las juntas vecinales», manifestó la alcaldesa.
La regidora de Castro aseguró que «seguimos invirtiendo en arreglar y renovar tanto las instalaciones de agua y saneamiento, como los caminos de los pueblos, cuyos ciudadanos tienen los mismos derechos que los residentes en Castro Urdiales».
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