La plantilla de la residencia de Castro lleva un mes sin cobrar tras la marcha de su director

Este periódico se ha puesto en contacto con los trabajadores del centro que aseguran que, en consecuencia a la renuncia laboral, no han cobrado el último mes y tampoco han recibido parte de su salario de octubre procedente de guardias de noche y festivos, aunque han continuado realizando su labor para no desatender a los residentes.

En este sentido, desde ASFAM los familiares han agradecido este esfuerzo a la plantilla por haber conseguido que la instalación siga funcionando a pesar de la ausencia del mando y de los problemas que ha generado su marcha.

Pese a que el Ayuntamiento aún no se ha pronunciado y alude solo a algunas «desavenencias», desde la oposición (PP) se explica que el motivo de la partida del directivo es la disconformidad respecto a su salario, quien había pedido equiparar su sueldo al de los profesionales sanitarios, a pesar de que expresó estar de acuerdo con la paga al acceder al puesto. Según se especifica en el Boletín Oficial de Cantabria dicho cargo directivo cuenta con una «retribución fija de 37.343 euros divididos en 14 pagas al que, en su caso, se le sumará una retribución variable.

Desde la asociación de familiares se lamentaba estos días en un comunicado la «nefasta gestión» del exdirectivo durante los años que ha permanecido en el cargo. Según ASFAM «no ha sido capaz» de dar solución a problemas de organización importantes que afectan al día a día de los residentes, «lo que se ha traducido en un empeoramiento de la situación», opinan. Asimismo, precisan que «la actitud de alguien al frente de una residencia de ancianos debiera mostrar empatía, humanidad, saber estar y ganas de mejorar las condiciones de vida de los residentes», algo que según ellos no ha pasado en este caso.

Ahora, la asociación, que ha mostrado también su apoyo a la Corporación en esta situación, así como a los trabajadores, manifiesta que la sustitución definitiva del director se produzca «cuanto antes» y que se opte en esta ocasión por «alguien capaz de crear comunidad» entre familiares, residentes y trabajadores, «siempre pensando en el buen funcionamiento de la institución», en lugar de «dividir y enfrentar a unos con otros, ocultarnos los problemas y generarnos desconfianza sobre su gestión», zanjaron.

Desde el equipo de gobierno castreño se ha declinado hacer declaraciones por el momento sobre este asunto, emplazando a realizar una valoración los próximos días. Según explican fuentes municipales, está pendiente cubrir esta plaza para retomar el funcionamiento administrativo de la Residencia Municipal, mientras la oposición, en este caso el grupo popular encabezado por su portavoz Cristian Antuñano, aseguraba, a preguntas de El Diario Montañés, que su grupo está «valorando solicitar una sesión de Consejo Rector extraordinaria», para conocer con detalle lo sucedido y las soluciones que baraja el equipo de dirige la socialista Susana Herrán.