«Se pueden hacer muchísimas manualidades con materiales reciclados para que los niños no estén tan pegados a los dispositivos electrónicos»

¿Cómo comenzó en el mundo de las maquetas?

Mi padre hacía trabajos con madera cuando yo era pequeño, cosas preciosas y eso me animó. Él me enseñó. Soy Brasileño, pero vivo en España desde hace 17 años. Me dedico a la hostelería, soy cocinero, y todas las semanas veía cómo venían cajas de madera con el vino. Yo cogía esas cajas y las de fruta y les daba otra vida, hacía barquitos, coches… De este modo, en vez de terminar en la basura, hago algo bonito con ello.

¿Por qué ha decidido hacer esta exposición de barcos?

Las posibilidades son infinitas, se puede hacer de todo con madera recuperada y estamos en una villa marinera. En este caso, el primer barco que hice fue el pesquero y después pensé en hacer el Titanic. Ambos son muy diferentes entre sí. Después fui haciendo un barco crucero, un carguero, luego la barca de Noé… y así surgió esta colección.

Acerca con esta muestra la historia de embarcaciones relevantes…

Castro es un pueblo de pescadores. A los adultos puede que les suene más el origen o la historia que hay detrás de algunos barcos emblemáticos, pero hay muchos niños que desconocen esto. Me gusta que aprendan con mis réplicas la historia, que sepan de dónde partió el Titanic, que se hundió en su primer viaje y otros datos.

¿Qué técnica emplea para elaborar sus creaciones?

En primer lugar, hago planos en una hoja y los voy pasando a la madera. Corto la madera con la máquina y voy haciendo en primer lugar el esqueleto. Esta es la parte más importante. Es como hacer un barco de verdad, pero en miniatura. Después hay que ir rellenando y tapando el esqueleto con masa a base de polvo de madera y después pinto el barco. Para ello tengo un pequeño taller en casa en el que cuento además con lijadora, taladros y un minitorno, entre otras cosas.

¿Cuáles son las maquetas más difíciles de realizar?

Los aviones tienen muchos detalles y eso es lo que más cuesta. Lo mismo pasa con el Titanic. El esqueleto, como digo, es lo más trabajoso y tiene que encajar a la perfección para que salga con la forma que queremos. Es una parte que requiere de un trabajo muy preciso porque sirve de guía para el resto de la obra.

¿ A qué réplica de sus barcos le tiene especial cariño?

Lo tengo claro. El Titanic. Me llamó mucho la atención incluso a mí cuando lo vi terminado. Mide 90 centímetros, tardé 48 días en construirlo, me costó mucho y necesité de mucha paciencia. Fue muy difícil de hacer. También destacaría el arca de Noé, con sus animales y sus rampas, quedó también muy bonito. Por señalar alguno más, el barco crucero también tiene significado, pues le empecé a hacer en marzo, justo con la pandemia del coronavirus y no se podía salir a comprar nada, así que está compuesto íntegramente de material reciclado que tenía en casa y estoy satisfecho con el resultado.

¿Qué le lleva a querer trasmitir a los ciudadanos las oportunidades que tiene trabajar con materiales reciclados?

El hecho de poder darle otro uso a un material que iba a terminar en la basura. Cuando veo algo de madera abandonado a veces está en muy mal estado, hay que hacerle mantenimiento y recuperarlo de la humedad… me parece muy interesante este tema y llevarlo a las escuelas, como ya lo hice por dos veces en el colegio Arturo Dúo de Castro. Se pueden hacer muchísimas cosas y manualidades con materiales reciclados para que los niños no estén tan pegados a los dispositivos electrónicos». Me gustaría llevar todo esto a las escuelas, que el Gobierno de Cantabria me diese la oportunidad de enseñar a los niños cómo dar forma a los materiales reciclados para que aprendan a hacer algo diferente.

De hecho, su firma es Reciclart…

Es un nombre que pongo en mis trabajos y que quiero llevar a las exposiciones que haga. Tengo réplicas de camiones de bomberos de varios tipos, coches antiguos, camiones de basura, trenes, aviones… he ido haciendo muchas obras de arte a lo largo de los últimos cuatro años con materiales reciclados

¿Qué espera provocar en el visitante cuando vea su muestra?

Que salga con la mentalidad de que este chico coge una madera reciclada y hace algo bonito. La gente se queda impresionada por lo general cuando sabe de dónde han salido los materiales con las que he creado las figuras. Además, a los niños es encanta ir a visitar la exposición, despierta su curiosidad.

¿Otros proyectos futuros?

Ahora estoy inmerso en la actual exposición. No estoy trabajando en más maquetas porque necesito unas vacaciones de artista (sonríe). Para futuras muestras he pensado hacer edificios emblemáticos de Castro Urdiales como la iglesia de Santa María, el Castillo-faro y otros puntos turísticos. Ya veremos, hay muchas opciones. Es mundo gigante en miniatura.