«Entre las quince escenas de la Pasión hay 384 muñecos de Playmobil»

Este Viernes Santo es diferente…

Soy componente de la Pasión Viviente de Castro. Hemos hecho un recorrido por las calles con soldados y centuriones con tambores, sin escenas. No se ha podido hacer nada este año, pero hemos querido realizar esto de un modo espontáneo, sin darle publicidad para evitar aglomeraciones de gente, por eso para las 10.30 horas ya habíamos terminado. A la gente le ha gustado mucho, además para ellos ha sido una sorpresa.

¿Cómo surgió la idea de crear la exposición 'Pasión en Playmobil'?

El año pasado estuvimos confinados en casa. Tenía cajas de poliespán y empecé a hacer una escuela municipal. Cuando la terminé la baje a mi lonja y seguí haciendo estos trabajos enfocados a la exposición. Según mis hijos iban viendo las escenas me iban animando a hacer más. Ya en enero le comenté al concejal de Festejos y a la de Cultura si querían venir a la lonja a ver lo que había hecho y cuando lo vieron pensaron en poder hacer algo para que los ciudadanos lo disfrutaran y yo encantado. Al de dos días me dijeron que haría la exposición en el Castillo-faro el 20 de marzo.

¿Qué pretende transmitir con la muestra?

Llevamos dos años sin Pasión Viviente por la pandemia. Quiero que la gente reviva el sentimiento de lo que es este evento en Castro y vienen a ver las maquetas y se emocionan.

¿Cuánto tiempo le ha llevado completar este trabajo?

He invertido unos 6 meses en hacer quince escenas: los juicios y el vía crucis por el pueblo. Cuando hice la de Pilato se me ocurrió poner estos muñecos y se los pedía los nietos. Vi que quedaban muy bien y empecé a comprar soldados romanos.

Ha tenido que realizar también labores de vestuario…

Sí. He hecho más de 50 vestidos a medida, los muñecos son soldados, pero tenía que ir adaptándolos a cada escena que iba haciendo. Los de Jerusalén visten diferentes, los de la Última Cena también, los de sanedrín… hay que integrarlos en cada escena y para ello he utilizado pintura, diferentes telas y esparadrapo. Es un trabajo muy completo.

¿Cuántos muñecos ha utilizado en total?

Entre las quince escenas hay 384 muñecos de Playmobil. Una de las mayores dificultades a las que me he enfrentado para poder hacer la exposición es encontrar los muñecos. Han venido desde Bilbao, Valencia, Sevilla y hasta de Alemania, porque al principio los compré en Castro, pero ya no podían recibir más

Eso se traduce en un desembolso de dinero considerable…

Digamos que lo compensa el éxito de la exposición. Ha tenido muy buena acogida, viene muchísima gente a verla. Es una inversión. Si va saliendo bien a uno no le importa gastar un dinero.

¿Cuál diría que ha sido la escena más compleja de crear?

La de Pilato y en la que sale el Ayuntamiento de Castro. Son dos escenas que me gustan mucho, aunque todas son bonitas, pero estas dos me han llevado bastante trabajo. Todas llevan, pero estas más.

Además de las maquetas de la Pasión, hay carteles y fotografías…

Sí, tenemos muchas fotografías expuestas y carteles de la fiesta desde el año 1985 hasta la fecha. La Asociación de la Pasión Viviente nos ha dejado exponer esas imágenes y los carteles. Es un pequeño homenaje a la Pasión, para revivir cada escena.

¿Tiene algo en mente para seguir trabajando sobre esta muestra?

Las escenas que he hecho son solo para esta exposición. Si más adelante hiciera otras cosas, compraría más material. Como la muestra termina el 5 de abril he hecho un armario muy grande en la lonja para meterlo allí para ver si se puede sacar el año que viene. De todos modos, seguramente en los próximos días podré llevar la exposición a Laredo.