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Los usuarios del Centro de Día de Castro Urdiales no están dispuestos a aceptar el cierre de las instalaciones en tanto se prepara para la creación de una residencia de mayores en sus plantas primera y segunda y la modernización del propio Centro de ... Día, ubicado en el piso inferior. Las soluciones que el Gobierno de Cantabria ha aportado a los usuarios mientras se ejecutan los trabajos, que está previsto que comiencen en 2023 y se prolonguen por espacio de un año, «no cubre sus necesidades», según relata a El Diario Montañés María Antonia Caparrós, representante de las familias, que casi en su totalidad -22, de las 25 plazas actuales que hay ocupadas- han firmado un escrito de alegaciones contra el cierre del centro, dirigido al Instituto Cántabro de Servicios Sociales (Icass), a la Alcaldía de Castro Urdiales y a todos los grupos políticos que integran el Ayuntamiento.
En el texto solicitan que se acuerde «la continuidad del servicio, dictándose la resolución que determine la improcedencia del cierre del mismo». De no atenderse esta solicitud, los familiares de los usuarios exigen «que se nos proporcione una copia del expediente administrativo que ha dado lugar a la resolución que acuerda el cierre del Centro de Día», y en este sentido, se refieren a la manera en la que han conocido su clausura «de manera informal», ya que «no nos han notificado nada formalmente y legalmente como tienen que hacerlo, sino que los familiares nos hemos enterado por la prensa».
«En ningún momento se nos ha comunicado acto o resolución alguna por la que se acuerde el mencionado cierre del centro y, no sólo eso, sino que desconocemos si realmente existe una resolución al respecto», denuncian, lo cual «impide que se puedan ejercitar debidamente los derechos de las personas usuarias, pues ignoramos cual es el acto o resolución que se podría recurrir».
Los familiares de los usuarios dicen encontrarse en una situación «angustiosa», ya que «no sabemos lo que va a pasar con nuestros familiares», según Caparrós. A algunos se les ha ofrecido plaza en el Centro de Día de Liendo, a otros en Laredo o Santoña, «pero hay gente a la que han llamado y no le han ofrecido ningún centro de día», afirman. A otros, con dependencia de grado 3 -el máximo- «le ofrecieron ayuda a domicilio de tres horas», o una compensación económica «que no te dicen ni cuanto es», lamentan. Opciones que, a su entender, «no cubren nuestras necesidades». Asimismo, denuncian que el transporte hasta los centros asignados solo sería gratuito para los usuarios con dependencia de grado 3, quedando excluidos los de grado 1 y 2.
Por su parte, la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CC OO en Cantabria ha anunciado que solicitará una reunión con la alcaldesa del municipio, Susana Herrán, y con el director del Icass, Julio Soto, con el objetivo de defender el servicio y los puestos de trabajo del centro.
«No tiene fecha de apertura y, durante el tiempo que duren las obras, las personas usuarias se tendrán que desplazar a lugares como Santoña o Laredo», apuntó el secretario de Negociación Colectiva de la citada Federación del sindicato, Carlos Ateca. Por ello, CC OO pedirá reunirse con la regidora para «solicitar que se habiliten otras instalaciones en la misma localidad y así asegurar un servicio que es esencial y los puestos de trabajo».
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