Zuloaga y Herrán reclamarán al nuevo Ejecutivo regional la continuidad del Plan Director de la iglesia de Santa María

Así lo han asegurado ambos esta mañana durante la visita que han realizado a las obras de la segunda fase de restauración de la iglesia, trabajos que contemplan la consolidación estructural y restauración de los muros exteriores de la nave central. Las obras, que comenzaron hace dos meses, tienen un plazo de ejecución de nueve meses y un presupuesto de 460.000 euros, financiados a través de los fondos europeos.

La alcaldesa ha trasladado su esperanza en que el nuevo Gobierno de Cantabria «continúe con este compromiso con nuestro patrimonio histórico y nuestra iglesia de Santa María, y que podamos conseguir llevar a cabo ese Plan Director integral y global». El plan contempla actuaciones de recuperación de la iglesia por valor de 10 millones de euros, según la alcaldesa, que ha recordado que se ha acometido una primera fase y está en ejecución la segunda, por un importe que supera el millón de euros, «con lo cual hasta cumplir ese objetivo de los 10 millones de euros para la recuperación integral del edificio quedan muchas fases por hacer y es lo que vamos a trabajar. Mi compromiso como alcaldesa para exigir al nuevo Ejecutivo regional, es que se sigan llevando a cabo las fases».

En la misma línea, Zuloaga ha evidenciado que el templo «evidentemente requiere más cuidados en el futuro» y no ha dudado en que Herrán «como alcaldesa seguirá siendo especialmente reivindicativa con el nuevo Gobierno de Cantabria«.

El Gobierno de Cantabria adjudicó en marzo el proyecto de consolidación estructural y restauración de los muros de la nave central de la iglesia de Santa María, con un plazo de ejecución de nueve meses y un presupuesto de 460.000 euros. Las obras, que afectarán a una superficie de aproximadamente 2.400 metros cuadrados, cuentan con financiación de los fondos Next Generation del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, en la línea de recuperar y revalorizar el patrimonio cultural inmueble, fomentar la cohesión social y económica y realizar actuaciones sostenibles en un bien religioso que está ubicado, además, en el entorno del Camino de Santiago, declarado Patrimonio Mundial.