Un vehículo camuflado y varias cámaras de seguridad para vigilar las calles de El Astillero

A los ladrones que quieran robar en el municipio de El Astillero se les va a poner la cosa difícil. El Ayuntamiento ha anunciado la implementación de un dispositivo de vigilancia que incluye un vehículo camuflado y varias cámaras de seguridad distribuidas por todo el municipio. Medios a los que se suma el llamamiento que ha hecho el alcalde, Javier Fernández Soberón, «a la población para que denuncie cualquier acto delictivo».

Lo que ha venido a decir el regidor para justificar la medida es que más vale prevenir que curar «ante la oleada de robos que se han producido en municipios vecinos, como Piélagos», de la que El Diario Montañés se ha hecho eco esta semana. A raíz de la noticia, «se nos ha ocurrido la iniciativa pionera de sacar a la circulación un coche camuflado», que funcionará a la vez que el vehículo oficial de la Policía Municipal, solo que no será identificable. Soberón piensa cambiar de coche cada semana –se obtendrán mediante un régimen de alquiler–. De esta forma, duplica el número de patrullas en el mismo turno con un vehículo que puede ver sin ser tan visto. De paso, el regidor aprovecha que la plantilla de la Policía Municipal está al completo con 22 agentes, lo que garantiza que pueda haber cuatro operarios por turno.

Paralelamente, el Consistorio sacará a licitación próximamente el pliego para contratar a una empresa de vigilancia que será la encargada de instalar y gestionar las cámaras de seguridad que serán distribuidas por todo el término municipal, así como en las entradas y salidas al municipio. Por suerte, «somos una península y no es complicado controlar los accesos Los dispositivos estarán conectados a las sedes de los cuerpos de seguridad y enviarán alertas en caso de que se produzcan incidentes. También dispondrán de lector automático de matrículas. «Hemos dado un paso importantísimo –apuntó Soberón– y pretendemos decirle a los ladrones que robar en El Astillero no es la mejor idea». Disuadirles ante la posibilidad de ser identificados o pillados con las manos en la masa. La actuación tiene un coste aproximado de 100.000 euros que sufraga íntegramente el propio Ayuntamiento con fondos propios.

Con todo, el regidor recordó que la medida más efectiva «es la colaboración ciudadana», así que se dirigió a los vecinos para decirles que «ante cualquier sospecha por nimia que parezca, se pongan en contacto con la policía y ya será ella quien decida si es importante o no». El alcalde pone a disposición de los ciudadanos un número de teléfono (942077092 ) «para informar de cualquier movimiento sospechoso». Cualquiera se atreve a moverse.

• Temas
• El Diario Montañes
• Policía Municipal
• El Astillero
• Piélagos
• Hurtos
• Okupas
• RADAR
• Robos
• Robos en viviendas
• San José