Los anestesistas de Valdecilla dejarán de trasladarse a Laredo para cubrir guardias

«Las mesas de trabajo se pusieron en marcha a principios de verano para debatir soluciones estructurales, esperamos reiniciar las negociaciones con los sindicatos en septiembre», señala el gerente del SCS, Rafael Sotoca, tras confirmar que «no será necesario prorrogar ese traslado de anestesistas desde Valdecilla, porque ahora mismo el equipo de Laredo puede asumir las guardias», toda vez que «dispone de seis anestesistas, de una plantilla de doce, activos para realizarlas». Recuerda que, cuando se aplicó esta medida extraordinaria sólo había tres disponibles para la cobertura de guardias, «con lo cual era imposible». Fue aquella situación «extrema» lo que motivó la denuncia pública del personal de Laredo, con concentraciones semanales a la puerta del hospital.

Sotocaes consciente de que la plantilla de Anestesiología está «en el límite», ahora con dos compañeras de baja, pero confía en que «no haga falta» repetir el traslado de profesionales desde Santander que, por otro lado, desencadenó la interrupción de las cirugías programadas por las tardes en Valdecilla. Una actividad que dependía de la voluntad de los anestesistas para hacer horas extra y que expresaron con su negativa el rechazo a la decisión de Sanidad. Ese parón se enlazó después con el descenso de la programación quirúrgica habitual en los meses de verano. «Ahora que ya no existirán estos desplazamientos, confío en que se retomen las cirugías de tarde para recuperar así los buenos datos de actividad y lista de espera», aunque por el momento no le consta que vaya a ser así.

Según datos de la Gerencia de Laredo, desde el 26 de mayo, que entró en vigor la orden de movilidad para los anestesistas, «se han hecho 186 guardias: 93 de presencia física y 93 localizadas. De todas ellas, se han cubierto 28 con personal de Valdecilla». El gerente del SCS entiende que se trata de una cifra «asumible» para el equipo actual y «no deja de ser un volumen pequeño para la plantilla de Valdecilla, que cuenta con más de ocho anestesistas de guardia cada día». «Ha sido una experiencia positiva para los profesionales que han tenido que desplazarse a Laredo. Ha habido muy buena disposición», subraya.

Esa orden para compartir profesionales entre servicios de distintos hospitales, que se extendió también a cardiólogos y neumólogos (en ambos casos durante seis meses), deja de ser efectiva a partir del sábado para los anestesistas, devolviendo al centro pejino al punto de partida, donde su mayor problema son las dificultades que tiene para atraer a nuevos especialistas. «Tenemos que discutir con los sindicatos medidas para estabilizar las plantillas. En las primeras conversaciones se habló de incentivos para que resulte atractivo el traslado. Estos movimientos deben estar coordinados con el plan nacional de Atención Primaria, que también contempla incentivos en plazas de difícil cobertura en el ámbito rural», añade.