El Centro Náutico Pesquero de Laredo abrirá sus puertas a comienzos de 2024

Para ello, según ha confirmado el consejero de Educación, Sergio Silva, han hecho acopio de material y equipamiento para «ir lo más rápido posible». Y es que a la Consejería le «urge» que las personas que actualmente están trabajando en el mar sin titulación cursen una formación -en este caso «de menos de cien horas»- para obtener un título habilitante para navegar.

Así, la Consejería asegura que están trabajando ya con la Dirección General de Pesca en los itinerarios formativos de los profesionales que tienen ya experiencia laboral para que, una vez acreditada dicha práctica, complementen su formación en Formación Profesional y titulen durante este mismo curso.

Se trata así de formar a los profesionales del sector que ya están ejerciendo para que mejore su cualificación. Los objetivos de la futura nueva escuela también pasan por fomentar las vocaciones entre la población de la región para facilitar el relevo generacional. Es esta una vieja demanda del sector pesquero, cuyos representantes lamentaban recientemente la falta de patrones en las embarcaciones. Esta cuestión produce una «gran preocupación» en el departamento de Educación que ahora se intenta solventar.

El proyecto del centro de Laredo, que comenzó su construcción en la primavera de 2022, acumula un retraso de varios meses, dado que estaba previsto que iniciara su actividad en el curso 2023-2024. El motivo principal, según ha explicado Silva, fue el accidente que costó la vida a uno de los trabajadores de la obra, que cayó al vacío desde la segunda planta del edificio. La caída se produjo al vencer una de las barandillas de seguridad dispuestas en la construcción. El desgraciado hecho trajo consigo la paralización de las obras durante casi dos meses para imponer medidas correctivas a petición de la Inspección de Trabajo y garantizar así la seguridad de los trabajadores. Tras la reanudación de las obras, Silva señala que los trabajos, que acomete la empresa Tragsa, avanzan «a buen ritmo».

Una vez culminado el edificio, -que ocupa una superficie de 2.000 metros cuadrados divididos en tres alturas- la escuela se equipará con el material que la Consejería ya ha adquirido. En concreto, la maquinaria de la que dispondrá el centro será tecnología punta para situarlo como referente a nivel nacional.

En sus inicios, la elección de Laredo como sede del Centro Náutico Pesquero estuvo marcado por la polémica pues también el Ayuntamiento de Santoña se postuló para acoger esta escuela. Tras la elección de la villa pejina, llegó el rechazo vecinal a la ubicación elegida para el futuro centro, junto a uno de los accesos a la zona portuaria.