Comienzan las obras de la carretera entre Laredo y Limpias

Llega tarde, pero llega. Al menos si nos ceñimos a las palabras pronunciadas por el consejero de Fomento, Roberto Media, quien dijo que la adecuación de la carretera que separa el Alto de Laredo y Seña, en Limpias, es un proyecto pendiente desde el año 2017. Blanco colocó este viernes la primera piedra de las obras de mejora de la CA-500, proyecto que va a suponer una inversión del Ejecutivo cántabro de casi 3 millones de euros y que tendrá un plazo de ejecución de 18 meses. Lo hizo acompañado de los alcaldes de Laredo, Miguel González, y de Limpias, Ignacio Sáinz, quienes reconocieron que se trata de una «de las principales demandas del muncipio».

Y es que según informaron, el vial de tres kilómetros que comunica ambos núcleos y que tiene doble sentido de circulación, resulta «sinuoso, con curvas cerradas y apenas cinco metros de anchura, lo que dificulta la circulación de dos vehículos al mismo tiempo». La actuación proyectada permitirá «incrementar la anchura de la plataforma hasta los 5,5 metros, más arcenes de 0,25 metros y sobreanchos en curva, con el objetivo de mejorar la seguridad vial» desde el comienzo de la carretera en el Alto de Laredo, junto al puente que supera la A-8, hasta el núcleo urbano de Seña. Además, se van a construir nuevas cunetas y se renovará la señalización y la iluminación, mediante la instalación de luminarias led. La empresa adjudicataria del contrato es la UTE Eiffage Infraestructuras, S.A. – Global Tektia, S. L.

El consejero de Fomento sacó pecho sobre la puesta en marcha al fin de este esperado proyecto. «Aquí estamos nosotros para demostrar que pasamos de las palabras a los hechos y que tenemos la rara costumbre de cumplir lo que prometemos», afirmó. Una «obra pendiente» que va a suponer «un paso adelante» en materia de comunicaciones.

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