Costas avanza en la demolición de la Escuela de Vela con un estudio arqueológico

El ya emblemático edificio de la Escuela de Vela, situado en la playa del Puntal de Laredo, parece estar más cerca de su desaparición definitiva. Aunque su demolición lleva en la agenda desde hace 25 años, los litigios entre Costas y el Club Náutico de Laredo han retrasado significativamente el proceso. Ahora, la Dirección General de la Costa y el Mar, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), ha dado un nuevo paso al adjudicar un contrato para un estudio arqueológico que acompañará las obras de demolición.

Por su parte, el Ayuntamiento no está conforme con la decisión y asegura que defenderá tanto el espigón como el edificio mediante un escrito de alegaciones que ya ha presentado. En sus alegaciones, sostienen que la demolición propuesta es excesiva, ya que el proyecto original no contemplaba derribar el muro. Además, argumentan que dicha pared no estaba incluida en la concesión otorgada en 1970.

Asimismo, destacan que el espigón forma parte del Camino de Santiago, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1993. Por lo tanto, consideran que la demolición sería contraria a la normativa sectorial de protección del patrimonio cultural.

El análisis arqueológico tiene como propósito proteger y conservar posibles hallazgos patrimoniales durante los trabajos, en línea con las normativas de patrimonio cultural y ambiental. La adjudicación, realizada a Pablo Saiz Silio por un importe de 13.310 euros -impuestos incluidos-, prevé un plazo de ejecución de ocho meses.

La demolición de estas instalaciones forma parte de un mandato judicial vinculado a la extinción, en el año 2000, de la concesión otorgada al Club Náutico de Laredo en 1970. La concesión inicial, con una duración de 30 años, autorizaba la construcción de un muelle flotante, surtidores de combustible, una escuela de vela y otras infraestructuras. Sin embargo, al vencer el plazo, la Dirección General de Costas negó su renovación y ordenó la demolición por irregularidades en las obras realizadas. Tras un largo proceso judicial, el Tribunal Supremo ratificó la obligación de derribar las estructuras y restaurar la playa de El Puntal.

El proyecto de demolición, cuyo presupuesto base asciende a 357.873,97 euros, contempla la eliminación de diversas estructuras, como el edificio del Club de Remo, el extremo del espigón, la plataforma de hormigón usada como estación de servicio, el muelle flotante, la terraza y la rampa. Las obras también incluyen la creación de accesos temporales, la retirada y clasificación de escombros, y la regeneración de la playa. Para minimizar el impacto ambiental, se empleará maquinaria equipada con medidas de protección, y los residuos serán enviados a vertederos autorizados.

El Ayuntamiento de Laredo ha intentado en varias ocasiones evitar la demolición del edificio, proponiendo, entre otras cuestiones, su reutilización como Centro de Interpretación Medioambiental. De hecho, los alcaldes de Laredo, Miguel González; y de Santoña, Jesús Gullart, alcanzaron un acuerdo hace varias semanas para defender tanto el mantenimiento del edificio como del espigón, planteando su uso para mejorar la accesibilidad de las personas que embarcan o desembarcan en esta zona. Sin embargo, las resoluciones judiciales, junto con la postura firme de la Dirección General de Costas, han mantenido vigente la orden de demolición.

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