La espera para consulta en cardiología en el Hospital de Laredo triplica a la de Valdecilla y Sierrallana

Miguel Carrascosa y José Gutiérrez trasladaron al responsable del SCS su inquietud por esta falta de equidad en el acceso a la asistencia de prestaciones sanitarias entre los habitantes de Cantabria en función del lugar de la comunidad en el que residan. De esta manera, propusieron que los pacientes sean derivados a otros centros donde puedan ser atendidos. «Nos parece intolerable que los pacientes del área oriental de Cantabria no sean tratados con equidad en cuanto al acceso a consultas de determinados especialistas médicos. La solución ideal es que hubiera aquí el número adecuado, las plantillas al 100%. Pero mientras eso no sea posible, no entendemos cómo no se remiten a las consultas adecuadas de Valdecilla a los pacientes pendientes de ver en el Hospital de Laredo», explicaron.

En la reunión quedó garantizada la continuidad del Hospital Comarcal, así como el mantenimiento de su cartera de servicios. En cuanto a las actuales obras de ampliación y la posible entrada en funcionamiento de las distintas unidades, se prevé que la entrada en funcionamiento de la unidad de Resonancia Magnética esté operativa en este primer trimestre. Para ello habrá que adosar al actual complejo la cápsula que viene directamente de Japón. Su entrada en funcionamiento será un avance notable para los pacientes, evitando desplazamientos y permitiendo un diagnóstico precoz. En este área es reseñable la contratación de un nuevo radiólogo.

En cuanto al nuevo área de quirófanos, el cálculo es que entren en funcionamiento antes del próximo verano. Se incluirá una unidad de reanimación post operatoria, pero no así la unidad de corta estancia asociada, que de momento no se contempla, sobre todo por el tema de la falta de profesionales. Los partos se atenderán también en la nueva zona quirúrgica, a la espera de que se remodelen los antiguos quirófanos para que sean el destino definitivo del área de partos.

En la reunión quedó patente que «el problema fundamental de Laredo, como de otros hospitales pequeños, es que son centros sanitarios de paso para los profesionales». Finalizado el 'parche' que se dispuso el pasado mes de mayo para paliar la crítica situación detectada y afrontar el verano con garantías, se estableció un plan de movilidad de médicos destinados en Valdecilla. De cómo se resuelvan en el futuro los recursos interpuestos al respecto dependerá que se pueda encontrar una solución. En opinión de la Asociación Vecinal Laredana, «es fundamental el desarrollo urgente de un marco legal que blinde la movilidad del personal médico entre los distintos hospitales cántabros, siempre que tal movilidad sea necesaria para garantizar la atención sanitaria de calidad y equitativa». Asimismo insistieron en que «los problemas del Hospital de Laredo son problemas de la sanidad pública cántabra y por tanto del Gobierno de Cantabria».