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La Plataforma Vecinal constituida en Laredo al estar en desacuerdo con la ubicación de la Escuela Náutico Pesquera en la parcela de la antigua nevera ha denunciado que se siga adelante con su construcción, «a pesar de las irregularidades e ilegalidades que hacen tambalearse» al proyecto. El colectivo asegura disponer de un informe pericial que acredita que el edificio se ha excedido en la ocupación de la superficie autorizada. Y no descarta acudir a los tribunales para que se paralicen dichas actuaciones.
Los integrantes de la plataforma aclaran que su discrepancia se ciñe a los terrenos elegidos y no al centro de enseñanza en sí mismo. En este sentido, reiteran su apoyo «a ultranza» a que Laredo acoja un Centro de Formación Profesional Náutico Pesquera «para que nuestros marineros no se vean obligados a salir fuera a obtener y renovar los títulos imprescindibles para desarrollar su trabajo y actividad». Además, consideran que «esta antigua reivindicación de los pescadores impulsará y dinamizará el comercio y creará puestos de trabajo en el propio centro».
Los vecinos que integran la plataforma insisten en que «para que todo esto llegue a buen puerto, debe primar la legalidad por encima de todo». Frente a esta aspiración, denuncian «los intereses políticos y claramente electoralistas que llevan a políticos sin escrúpulos a cometer ilegalidades». Entre ellas, citan el hecho de «no contar con los informes preceptivos como el de la Demarcación de Costas». También reseñan «la encomienda de Educación fuera de plazo» y hablan de «fraude de ley y presuntamente, prevaricación».
Pese a tales hechos, cuestionan «que se siga construyendo con total opacidad, falta de transparencia y sin contestar a las denuncias vecinales».
En cuanto a la obra en sí, se reafirman en que su ubicación se eligió «por descarte, sin ninguna valoración medioambiental, sin mirar los perjuicios que ocasionan», mientras que lamentan que «se desecharon otras ubicaciones disponibles mucho más acertadas y más óptimas para las prácticas».
A partir de esta constatación, advierten que la irregularidad de la parcela ha dado pie a que el edificio de la escuela no se ajuste a la superficie reservada, «por lo que se desparrama y se desborda, llegando a ocupar los viales. Han ocupado más metros de los permitidos», denuncian de forma contundente. Como ejemplo, citan el paso estrecho que ha quedado entre la parte delantera de la edificación y la entrada a la playa. «Han adelantado la escuela más allá de lo que se recoge en el proyecto, estrangulando el acceso a la Salvé», sostienen. Finalmente, apelan «a la búsqueda de otra salida digna para una de las mayores indecencias urbanísticas y políticas que hemos tenido y tenemos en Laredo».
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