Laredo autoriza la construcción de chalés en la polémica parcela del hotel Florida

El inicio del conflicto sobre esta parcela se remonta al año 1942, cuando el Ayuntamiento vendió el terreno donde se construyó el hotel Florida. Lo hizo en un acuerdo por el que se cedía al Consistorio una pequeña parte del terreno de forma triangular dentro de ese mismo solar, para el disfrute de los laredanos y en la que no se podía edificar. Es precisamente la titularidad de ese espacio discutido el origen del desacuerdo actual que se acaba de resolver con los informes técnicos.

Según fuentes municipales consultadas, la confusión sobre la titularidad de ese espacio radica en que, con el paso del tiempo, la condición que dispuso el Consistorio se fue desdibujando por los cambios en los diferentes planes urbanísticos (en concreto los PGOU de 1964 y 1987). Tanto es así que, hasta hace poco tiempo, los grupos municipales no contaban con informes que aclararan la propiedad del Ayuntamiento sobre ese terreno. De ahí la pugna entre unas y otras formaciones políticas pejinas durante la pasada legislatura, en la que se mostraban a favor y en contra de conceder esos permisos. Unos -el PP- se significaron por luchar para recuperar los documentos originales que sí reconocían esa propiedad mientras que otros grupos recurrieron a las actualizaciones en la legislación que han acabado levantando las cargas del Consistorio sobre el polémico triángulo de terreno.

Regresando al presente, al final de la pasada legislatura el PP -con el actual alcalde como portavoz- junto con Hacemos Laredo y la Agrupación Vecinal Sí Se Puede Laredo, defendieron los derechos del Consistorio sobre la parcela. De esta manera, estas tres formaciones, que en la anterior legislatura formaban la oposición -también Unidos por Laredo (UxL) pero no se posicionó en esta cuestión-, exigieron en pleno anular el levantamiento de cargas del Ayuntamiento sobre el solar. Llegaron incluso a interponer un recurso contra el acuerdo que favorecía las obras, al alegar que no contaban con la documentación preceptiva para poder decidir.

Finalmente, la iniciativa de la entonces oposición se denegó con los votos a favor de desestimarlo de las agrupaciones municipales que conformaban el equipo de gobierno (PSOE y PRC) y la abstención de UxL.

Ahora, tras concederse la licencia porque los informes de los técnicos desechan cualquier derecho de titularidad, el regidor aclara que -pese a que sigue manteniendo la idea de la pasada legislatura- no tienen otro remedio que cumplir con la legalidad. «Mi responsabilidad como alcalde es no prevaricar y firmar el documento porque todos los informes son favorables», destacaba.

La concesión de la polémica licencia ha sido objeto de críticas por parte del portavoz de Unidos por Laredo, Ramón Arenas. El edil criticaba el cambio de postura del ahora equipo de gobierno respecto a este asunto. En este sentido, el alcalde salía al paso para aclarar su consentimiento basando su defensa en los informes técnicos al tiempo que cargaba contra Arenas. «He sido uno de los mayores defensores de esa parcela», aclaró, culpando al portavoz de UxL de haber llegado a la situación actual y de que la villa haya perdido ese terreno. González afirmó que, al haberse abstenido Arenas en la sesión plenaria de octubre del año pasado para recurrir el asunto, facilitó el rechazo del recurso.

Por contra, Arenas sostiene que el regidor no dice la verdad y que adoptó una postura «demagógica» al defender la titularidad de los terrenos puesto que tenía que conocer que «la carga ya estaba retirada desde 1964 y ratificada en 1987 por los dos PGOU».