Laredo espera abrir su piscina este año tras una nueva demora en la finalización de la obra

El anuncio de la finalización de los trabajos en unos meses supone un nuevo retraso en la previsión municipal para la reapertura de las instalaciones. De hecho, en noviembre, desde el Ayuntamiento pejino se dijo que la estimación era que la obra estaría finalizada este mismo mes de marzo tras haberse aprobado un modificado del proyecto de reforma de la infraestructura, para hacer frente a «causas sobrevenidas». Sin embargo, este martes, el vicepresidente señaló que terminará en los próximos meses.

«Dentro de la hoja de ruta del Ayuntamiento de Laredo, en la parte más optimista, podríamos ver cómo este mismo año 2021 las instalaciones, después de la licitación y concurso público, podrían estar ya abiertas», dijo Zuloaga, que pudo comprobar in situ el «avance definitivo» de las obras «después de tantos avatares administrativos y técnicos». Por su parte, la alcaldesa, Rosario Losa, puso en valor el «cambio maravilloso» que va a experimentar la piscina, que gana en luminosidad, eficiencia y comodidad para los laredanos. «Vamos a licitar el servicio en cuanto podamos, a ver si este año puede ser una realidad. Pero, aunque no pudiera ser por los plazos, para mí es como si estuviera abierta porque ya se ve la luz», dijo la regidora.

La piscina municipal de Laredo permanece cerrada al público desde 2015 debido al importante deterioro que padecía en su estructura, especialmente en la cubierta. El proyecto inicial y el posterior modificado aprobado por el Ayuntamiento, que en su conjunto elevan la inversión a 1.210.000 euros, van a permitir resolver las deficiencias anteriores y adecuar los espacios para prestar un mejor servicio a los usuarios.

Además del arreglo de la cubierta, una de las principales novedades es la colocación de grandes ventanales que aportan luz natural y eficiencia energética a la instalación. En el interior, se han renovado los vestuarios y las zonas comunes y se han habilitado dos nuevas salas multiusos.

Por otro lado, se ha aprovechado la actuación para proceder a la recuperación patrimonial del exterior del edificio. Para ello, se ha intervenido sobre la fachada y se han recolocado las antiguas puertas metálicas de lo que en su día fue el matadero municipal.

Finalmente, se ha proyectado un nuevo servicio de cafetería, con acceso independiente desde el exterior, para su uso tanto por los usuarios de la piscina como por la ciudadanía en general.