Laredo reabrirá su piscina en el inicio del curso escolar

En la jornada de ayer dieron comienzo los trabajos de renovación del asfalto del exterior de la piscina. Estas labores sólo se acometen una vez que se descartan movimientos de gran volumen en las obras. Lo cual es indicativo, junto a los remates que distintos operarios vienen realizando en el interior del recinto, de que las obras están a punto de culminar. El propio Pedro Diego apuntó al mes de mayo como la fecha en la que dichas obras podrían ser recepcionadas por el Ayuntamiento.

A partir de ese momento, todas las miradas se dirigirán hacia la licitación del futuro contrato de explotación de la piscina. Sobre la responsabilidad por un presunto retraso en la tramitación, el edil indicó que «en el año 2020 ya se trasladan desde el área de Deportes distintos pliegos para dicha licitación». El problema, según explicó, se debe a la carencia de interventor. «El Estado no nos garantiza tener habilitados nacionales, pero sí nos obliga a tenerlos y a que firmen», expone. Para paliar la situación, Laredo ha contado con la cesión desde el Ayuntamiento de Castro Urdiales de un interventor acumulado, que venía un día a la semana a Laredo. Lo mismo que el actual interventor, que también es acumulado. Ello ha dejado pendientes muchos temas, como el de la piscina. «Ahora ya está con ello. Creo que la licitación va a salir dentro de muy poco tiempo, por lo que he hablado con el interventor y con los concejales de Deportes y Hacienda y Contratación», reiteró.

En cuanto a si el retraso en la apertura de la piscina pudiese responder a fines electoralistas, tal y como insinúan desde la oposición, indicó que «hay gente que piensa que crear problemas para solucionarlos le viene bien. Yo procuro no crearlos, no tenerlos», zanjó.