«No hemos oído nada, a veces había discusiones, pero normales»

En uno de esos pisos, el cuarto del portal número 2, donde coincidían y saludaban a otras personas, vivían Rebeca y su asesino, Tomás, con varias amigas desde hace más o menos un año. Las mismas compañeras a las que los servicios de emergencias han encontrado encerradas en una de las habitaciones tras haber escuchado lo que ocurría. Y lo que ocurría era Tomás asesinando a su pareja. O expareja, para ser exactos, pues hacía varios días que habían terminado la relación y él se había marchado del piso que compartían.

Rebeca ya es la primera víctima mortal de la violencia de género en España. Otro de esos casos en los que todo era «normal». O al menos eso dicen sus vecinas, que en declaraciones a la agencia EFE afirman que la pareja tenía discusiones «normales». Sin embargo, esta noche, cuando en torno a tres y media de la madrugada, cuando la joven de 26 años era apuñalada, no escucharon nada. Como tantos ciudadanos, se han enterado al despertarse por la mañana, cuando ya habían acudido los servicios de emergencia a intentar reanimar sin éxito a la mujer.

«Empezamos el año muy mal», ha dicho una de las vecinas, quien lamenta que en este siglo se «siga así» con este tipo de casos.

Una de las vecinas afirma que los jóvenes vivían desde hace un año en el cuarto piso del portal número 2 de la calle Rosario Ochandiano, de Laredo, y que estaban en la casa con otros jóvenes.

Todas ellas han lamentado estos hechos y han asegurado que nada les ha hecho pensar en que podía ocurrir lo que anoche se produjo en ese piso de Laredo.