El PP vence por la mínima en Laredo y deja pendiente de pactos la Alcaldía de la villa

Miguel González, líder popular, se encuentra con una victoria que tiene sabor agridulce. Pese a ganar, se deja casi un centenar de votos respecto a los logrados por su partido hace cuatro años, y repite uno de los peores resultados históricos del PP en la villa pejina.

Su triunfo se traduce en tres concejalías, las mismas que alcanzan Hacemos Laredo y Unidos x Laredo, y se explica, sobre todo, por la debacle de quienes sustentaban la actual coalición de gobierno, PSOE-PRC.

Ambas formaciones han perdido el 50% de sus concejales, pasando de cuatro a dos, en un desplome más acusado entre los regionalistas, que pasan de segunda a séptima fuerza en el Ayuntamiento de Laredo. Rapapolvo igualmente para los socialistas de la lista encabezada por la actual alcaldesa Rosario Losa. Su revés se ve agudizado por el simbólico sorpasso a manos de Hacemos Laredo, formación escindida del PSOE y que lidera el histórico Juan Ramón López Revuelta, quien a sus 78 años rozó el primer puesto en una noche de infarto.

Conoce a los candidatos de Laredo

En el capítulo de triunfadores cabe reseñar el importante crecimiento que registra Unidos x Laredo, cuyo concejal Ramón Arenas logra triplicar la representación, gracias a sumar 610 votos que le dejaron a las puertas de los mil votos.

Cierran el balance dos formaciones que irrumpen con fuerza en el Consistorio. De un lado, Ola Cantabria, con Laura Recio al frente, que ha visto cómo la apuesta de los exmilitantes del PP se ha traducido en 744 votos y dos actas de concejal.

El mismo resultado obtiene la coalición IU-Podemos, que hace cuatro años concurrió por separado y que tendrá a sus líderes Álex Abad y David Palacio como nuevos ediles en una corporación más dividida que nunca. Vox, con 250 votos y un 4% de representación, queda excluido en su primera intentona de acceder al Ayuntamiento laredano.

Las urnas arrojan un significativo giro hacia la derecha del electorado pejino, cuya división en varios bloques ha impedido un triunfo mucho más rotundo. Porque si hace cuatro años PP y UxL sumaban cuatro ediles, ahora dichos resultados se han doblado, y sumados los restos de estas dos formaciones más Ola Cantabria a los votos de Vox, hubieran alcanzado la mayoría absoluta.

Precisamente esas cuitas internas, a uno y otro lado del tablero político, se sitúan como el principal escollo a la hora de encarrilar la gobernabilidad. Un escenario que requerirá de pactos a tres o más bandas. Con la duda de saber el alcance de las líneas rojas o vetos cruzados entre quienes antaño compartían siglas y que ahora son rivales. Eso sí. Todos enfundados en la camiseta de Laredo, que hoy amanece tratando de digerir el terremoto que arrojan los resultados, conscientes de la difícil papeleta que tienen por delante.