El Centro Náutico-Pesquero de Laredo leva el ancla hacia la innovación

El Centro Integrado de Formación Profesional (CIFP) Puerto de Laredo marca un antes y un después en la oferta educativa de Cantabria. Así se ha puesto de manifiesto este viernes, en el acto de inauguración del nuevo centro, que funciona desde el comienzo del curso y es la primera escuela que incorpora en la región la especialidad de la modalidad náutico-pesquera. Y es que, tal y como ha manifestado la presidenta del Gobierno de Cantabria en el acto, «hasta ahora Cantabria tan solo ofertaba el título de Mantenimiento y Control de Maquinaria de Buques y Embarcaciones en el CIFP Nº 1 de Peñacastillo, que carece de homologación para emitir los certificados de especialización, con lo que los profesionales se veían obligados a desplazarse a Asturias o País Vasco». Algo que no será necesario a partir de ahora. O más bien, desde el pasado mes de septiembre.

Buruaga, que ha acudido a inaugurar este «hito» acompañada del consejero de Educación, Sergio Silva; de Fomento; Roberto Media; y de Ganadería; María Jesús Susinos, así como del alcalde de Laredo, Miguel González, ha expresado que «la situación ha cambiado radicalmente» y el CIFP 'Puerto de Laredo' ofrece la posibilidad «de obtener y renovar esos certificados» que se exigen para ejercer la pesca profesional, formar parte de la tripulación de buques o trabajar en el mantenimiento de todo tipo de embarcaciones.

La nueva instalación educativa ha supuesto una inversión de la Consejería de Educación de casi 5 millones de euros, entre las obras (3,6 millones) y el equipamiento (1,2 millones), y se convierte en «el buque insignia del cambio en la FP de Cantabria» que está impulsando su Gobierno. La Formación Profesional, ha dicho la presidenta, es «la mejor política activa de empleo» y se ha consolidado como la titulación más demandada en Cantabria, donde en estos momentos representa más del 40% de las ofertas de empleo y donde hay casi 15.000 alumnos estudiando ciclos formativos. Por su parte, el alcalde ha destacado que han trabajado de manera «incansable» para sacar adelante este proyecto en Laredo y ha agradecido el empeño del Gobierno de Buruaga.

El edificio cuenta con 18 espacios, entre los que destacan aulas especializadas, talleres de climatización, automatismos y una sala de simulación de comunicaciones. Las «joyas de la corona» del centro, como ha apuntado el regidor, son las salas de simulación de máquinas y navegación. En esta última, uno de los alumnos ha realizado una demostración en tiempo real, destacando el realismo de los equipos, clave para la formación de los futuros profesionales marítimos. El centro actualmente alberga a 73 estudiantes y 18 profesores.

A pesar de todo, el acto ha estado marcado por las protestas de sindicatos docentes, que han vuelto a exigir una mejora en las condiciones salariales del personal educativo. A las 11.00 horas, mientras las autoridades se congregaban para descubrir la placa del centro, representantes de los sindicatos Anpe, Stec y Comisiones Obreras se manifestaron en las inmediaciones, lanzando consignas como «Buruaga paga, paga, paga». Los manifestantes, armados con silbatos y pancartas, lograron hacer oír sus reclamos desde el interior del edificio. 

A preguntas de los medios de comunicación respecto a las protestas de la Junta de personal docente, la presidenta de Cantabria ha asegurado que su Gobierno «siempre y en todo momento ha tenido una actitud de diálogo y negociación antes, durante y después del encierro». Al hilo de esto ha recordado las reuniones celebradas los días 19 y 22 de noviembre con los docentes y ha garantizado que «respetan y comprenden» sus peticiones pero el presupuesto «no es un chicle» y los recursos son «limitados».

Así, la popular ha destacado las medidas ya implementadas en beneficio del sector educativo como una inversión de 8 millones de euros para nuevos profesores este curso, la reducción de ratios en Educación Infantil y de la jornada laboral para mayores de 55 años o un gasto diario de 127.000 euros en sustituciones docentes. «No se puede hablar de un colectivo insultado ni castigado, sino de un colectivo atendido», ha declarado y, en cuanto a las recientes protestas, la presidenta ha rechazado rotundamente lo que ha calificado como intentos de presión indebida: «No voy a consentir chantajes ni que ningún colectivo pretenda imponer su criterio por la fuerza, alterando el normal funcionamiento de una instalación pública», ha zanjado.

Por su parte, Miluca Berberana, de Stec, en nombre de los sindicatos ha afirmado que hay dinero pero el Gobierno decide invertirlo en otras cuestiones.

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