Unidos por la restauración de Santa María

Al frente de la parroquia se encuentra Juan Luis Cerro, luchador incansable que trata de dar visibilidad al problema del templo para que su precaria situación no caiga en el olvido. «A finales de este mes vendrá el consejero de Cultura a ver la iglesia». «Creo que está bastante empeñado en que esto salga adelante y ha mostrado interés», explica el párroco.

«Ocurre siempre que llueve, sobre todo, cuando hay chaparrones como esta semana. Los problemas que tiene Santa María son los que son y el vídeo que hemos colgado en las redes sociales es llamativo», explicaba Cerro, que grabó algunas imágenes que muestran las goteras del templo y las subió a las redes sociales. El sacerdote recordaba que hay una campaña parroquial llamada 'Yo soy parte de esta iglesia', en la que la gente aporta dinero para comprar tejas que, de manera simbólica, son las que se utilizarían para el arreglo del tejado. «Es un problema en el que todos debemos actuar: el Obispado está poniendo su granito de arena y este año creo que podremos arreglar parte de la sacristía grande que está detrás de la iglesia y que también tiene muchísimas humedades».

El sacerdote asegura que el Ayuntamiento de Castro es sensible a la situación del edificio y habla de la Consejería de Cultura porque Santa María es un BIC (Bien de Interés Cultural) y por ello el Gobierno regional ha de velar por su mantenimiento. Cerro recuerda también el papel del Instituto del Patrimonio Cultural «que anda a vueltas con el Plan Director, que es algo que le falta a esta iglesia y es muy necesario». «Sería parte de la solución, una parte importante pero se pueden hacer cosas de manera simultánea. No está reñido que se arregle el tejado de la iglesia y las administraciones implicadas, la propia parroquia, la Consejería y el Ayuntamiento unan sus fuerzas».

El plan director del que adolece el edificio contemplaría el modo en el que hay que acometer la obra del tejado y para Cerro, «lo mejor sería abordar las dos cosas al mismo tiempo ya que es la única iglesia de Cantabria que no tiene plan director». «De hecho, esto es un Bien de Interés Cultural y yo no puedo arreglar nada así como así, sin contar con el resto de instituciones. Espero arreglar la parte de la sacristía pero es un tejado aparte que no afecta al resto de la construcción y para ello he tenido que presentar el proyecto en el Ayuntamiento y en la Consejería de Cultura para recibir los permisos pertinentes que aún están por llegar», explica.

Desde el Consistorio castreño, el concejal de Patrimonio y Puebla Vieja, el regionalista Antonio Bocanegra, apunta que el Ayuntamiento sólo puede «apoyar en lo que es posible dentro de nuestras competencias, que son pocas pues la competencia es de ámbito estatal porque es un monumento nacional y uno de los activos monumentales más importantes de lLaredo». En ese sentido, el edil añade que «todo aquello en lo que podamos aportar algo, dentro de una situación que no controlamos, podrán contar con el Consistorio». Respecto a la próxima visita del consejero de Cultura, prevista para finales de septiembre, Bocanegra apunta que «es algo positivo y todas las administraciones han de poner de su parte. El Ayuntamiento en todas las conversaciones que mantiene con los responsables de Cultura del Gobierno de Cantabria, lo que hace es poner de manifiesto que una de sus mayores preocupaciones es el estado en el que se encuentra la parroquia».

Desde la Asociación Amigos del Patrimonio de Laredo destacan que «hacer visible el estado en que está la iglesia de Santa María de la Asunción es siempre nuestro objetivo». Así lo explica su presidente, Tinuca Revolvo, quien recuerda que «queremos que los políticos se involucren en el tema del patrimonio laredano y de su baluarte».

«La parroquia es propiedad de la Iglesia, pero también hay una responsabilidad por parte del Gobierno y del Ministerio de Cultura porque se trata de un Bien de Interés Cultural». Revolvo insta a las administraciones implicadas a «sentarse para sacar adelante un Plan Director que apoye la rehabilitación de la parroquia». Desde hace más de un año, Amigos del Patrimonio ha unidos sus fuerzas con el párroco en su campaña para hacer visible los problemas que presenta de esta joya del gótico.