El acondicionamiento de la N-621 entre Potes y Vada pasa el listón ambiental

Junto al Desfiladero de La Hermida, el acondicionamiento de la N-621 entre Potes y Vada (Vega de Liébana), son las dos obras estrella estatales de esta legislatura en la comarca. El acceso a la provincia de León hacia el puerto de San Glorio es una vieja reivindicación de vecinos y alcaldes por la peligrosidad de este tramo, lleno de curvas de radio muy reducido y una anchura de calzada demasiado estrecha.

La buena noticia es que el proyecto de acondicionamiento de los 11 kilómetros de carretera entre Vada (Vega de Liébana) y Potes (presentado en 2022) ha superado ya el informe de impacto ambiental, por lo que se salva un escollo importante en su tramitación. Y es que este tramo se encuentra en un entorno natural privilegiado, con tres espacios incluidos en la Red Natura 2000, además de la Zona Especial de Conservación (ZEC) del río Deba y la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) Liébana.

El proyecto, que ya ha sido publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) junto a la resolución ambiental, plantea el acondicionamiento de la carretera a partir de la localidad de Potes hasta encarar el puerto de San Glorio. Es la principal conexión de la capital lebaniega con León por lo que tiene una demanda intensa de tráfico, especialmente en verano, precisamente por el alto interés paisajístico y natural de este espacio. Además, la importancia de acondicionar este tramo también reside en que es la única vía de acceso desde la cornisa cantábrica hacia los valles de Camaleño, Liébana y Picos de Europa.

La peligrosidad de la carretera está en sus pronunciadas curvas y la estrechez del vial que en muchos tramos no supera los cinco metros. Es por ello que el proyecto contempla la rectificación de esas curvas y su radio, así como la ampliación de la plataforma a una medida convencional de 8 metros (6 de calzada y uno a cada lado de arcén), además de la mejora de la señalización y el balizamiento.

El proyecto contempla también tres puentes sobre el río Quiviesa, además de varios muros de contención, voladizos o sistemas de contención en varios puntos de esta carretera de montaña. Además, la alternativa elegida para la ejecución de las obras en condiciones ambientales óptimas, elimina la posibilidad de demoler el puente Quiviesa.

El alcalde de Vega de Liébana, Gregorio Alonso, se mostró «satisfecho» por el hecho de que el proyecto de la carretera hubiese superado el listón ambiental. «Estamos muy contentos de haber superado esta fase, ya que en estas zonas protegidas es el trámite más difícil», valoró. A juicio de Alonso, se trata de la culminación de un proceso complicado, en el que se ha estado trabajando largo tiempo «insistiendo mucho en que no se parase como ha sucedido en otras ocasiones», resumió.

Para el regidor, la ejecución de esta carretera viene a resolver «un importante desequilibrio que se da en la comarca en materia de infraestructuras», afirmó. A su juicio, el acondicionamiento de la N-621 supondrá «una mejora que se percibirá en todos los ámbitos, no solo en la mejora de la vialidad y seguridad, sino también en un aumento del valor y la calidad de vida de los habitantes del municipio», resumió. También recordó Alonso que ahora habría que seguir empujando para hacerlo realidad. «Superar el trámite ambiental es fundamental, pero aún no es un inicio de obra», recordó. Al respecto, la delegada del Gobierno en Cantabria, la socialista Eugenia Gómez de Diego, también se mostró satisfecha por la noticia, aunque reconoció que «no es un proyecto fácil», dijo, porque requerirá de estudios «muy detallados», con el diseño de infraestructuras «complejas, como pasos voladizos dada la difícil orografía de la zona».

• Temas
• Camaleño
• Cantabria
• Deva
• Liébana
• Picos de Europa
• Vega de Liébana
• Naturaleza
• Turismo en Cantabria