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El soleado día y las fechas, a las puertas de la Semana Santa, sumaron mucha afluencia ayer a la decimotercera edición de la Feria de Caza, Pesca y Productos Agroalimentarios de la comarca de Liébana. Una cita que, según los organizadores, se ha consolidado como ... uno de los eventos «más importantes» del calendario de actividades de la capital lebaniega. La feria, que se prolonga hasta hoy domingo en el recinto de La Serna, cuenta con un total de 51 expositores, entre firmas comerciales, organismos oficiales y federaciones, además de estands de productores agroalimentarios y cofradías gastronómicas de Liébana.
Este año, el invitado de honor es el periodista Antonio Montero, gran aficionado a la caza, a la que define como «una forma de vida». A su juicio, ser cazador «es disfrutar de una actividad que ha sostenido a la humanidad desde su origen», añadiendo que todos aquellos que lo practican «disfrutamos de la naturaleza en toda su dimensión, porque la caza es sufrimiento y esfuerzo, es viajar, aprender y compartir, y es sostenimiento e inversión en tantos pueblos desgraciadamente vaciados». Tras su intervención, los organizadores de la feria, con el presidente de la sociedad de caza lebaniega a la cabeza, Santos Fernández, hicieron entrega a Montero de un retrato realizado por la pintora María Isabel Gutiérrez.
Además de los alcaldes de la comarca, ayer rindieron visita a la feria la consejera de Presidencia del Gobierno de Cantabria, Isabel Urrutia, y el de Desarrollo Rural, Pablo Palencia, que al igual que visitantes y cazadores pudieron disfrutar de la numerosa oferta expositiva de actividades paralelas, como el concurso y exhibición de tiro al plato, los talleres de despiece de jabalí y de cocina de caza lebaniega y distintas exhibiciones de cetrería y artesanía en madera.
«La caza y la pesca representan amor y respeto por la naturaleza, devoción por el territorio, responsabilidad por la conservación de nuestro medio y por el cuidado de nuestro patrimonio natural, pero también son un instrumento importantísimo para luchar contra el despoblamiento», destacó Urrutia.
Otra de las actividades que más brillaron en la jornada de ayer fue la tradicional subasta de piezas de caza. Así, entre todas ellas, destacó una batida de venadas hembras y crías sin cupo, en el monte de Margaperas-Cotera Oria, en el Ayuntamiento de Pesaguero y que alcanzó la cifra de 4.000 euros con un precio de salida de 800. En total se subastó caza por importe de 74.750 euros.
Hoy domingo, la feria celebrará su segunda y última jornada. Además de la visita a los expositores, en la programación se incluye una exhibición de perros sueltos sobre jabalí salvaje y una muestra de técnica de pesca sin muerte. Además, se podrá disfrutar de una charla sobre crianza y tenencia de perros. La feria se cerrará con un reconocimiento a los cazadores.
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