Las familias de los bebés del aula de un año en Potes protestan por la falta de personal

A inicios de este curso la Consejería de Educación ponía en servicio el aula de un año en el Concepción Arenal. Desde entonces, acuden a diario una docena de bebés que asisten en horario de 09. 30 a 14.30 horas. Los mismos están asistidos por una maestra y una técnico educativo. En el caso de la docente, ésta cumple jornada hasta las 12.00 horas y, a partir de ahí, todos los niños se quedan a cargo de la técnico, hasta concluir la jornada escolar a las 14.30 horas.

En este sentido, los padres de estos alumnos-bebés han protestado y han dirigido una carta a la Consejería de Educación para reclamar igualdad de condiciones con la atención que se presta ya en las aulas de dos años que hay en el mismo centro y que están atendidas por dos profesionales. En este sentido, los progenitores consideran que «para su debida atención y seguridad, no es suficiente» que solamente una persona esté a cargo de los niños. Es por ello que han solicitado que sean dos las personas quienes atiendan «de forma continua», a sus hijos durante la jornada escolar, como así ocurre con los pequeños de dos a tres años.

En la carta enviada -que ha sido firmada por todos los padres de los alumnos afectados- explican la problemática y estiman que la docena de niños de entre uno y dos años, no pueden estar a cargo de una sola persona «porque la diferencia entre ellos es grande, ya que no es lo mismo un niño o niña que haya cumplido el año en diciembre, que el que en el mes de enero cumpla ya los dos años», comparan, para explicar que «las necesidades son completamente distintas» y la persona que asiste y se encarga de su cuidado y bienestar en el aula entre las 12.00 y las 14,30 horas, «tiene serias dificultades para poder desarrollar su labor», afirman.

Al respecto, no entienden porque no se aplica el mismo criterio de necesidad de personal que en las aulas de dos años y explican que debiera ser más bien lo contrario, «ya que al ser niños más pequeños, las necesidades de estos alumnos son notablemente mayores», valoran.

Debido a la preocupación que tienen los padres de estos bebés reclaman a la Consejería de Educación que se atienda su demanda y se autorice la asistencia de dos personas «de forma permanente» en el aula de un año para poder «garantizar su seguridad y bienestar».

Asimismo, recuerdan al departamento que dirige Marina Lombó que tenga en cuenta las dificultades orográficas y de población envejecida que tiene de por sí Liébana como un plus para garantizar la mejor asistencia a las familias jóvenes para que apuesten por el territorio . «Nos encontramos en una zona rural, mal comunicada y con pocos servicios públicos, es muy necesario que aquellos con los que contamos funcionen adecuadamente, por lo que todos los padres, solicitamos una pronta respuesta a nuestra justa petición», concluyen.