Del Bosque descubre el orujo

Del Bosque es, desde ayer, el nuevo «embajador de esta tierra», como dijo el alcalde de Potes, Javier Gómez, en el salón de plenos municipales, donde el nuevo orujero mayor recibió los cálidos y prolongados aplausos de los lebaniegos. El exfutbolista agradeció las alabanzas pero, fiel a sus principios, se quitó toda importancia. «Sólo soy un hombre lleno de imperfecciones, sólo soy un entrenador de fútbol», dijo antes de agradecer el trabajo conjunto de la Corporación municipal «por trabajar por esta tierra, al margen de toda ideología política, con el compromiso social por vuestro municipio». Y destacó también «la generosidad, que es rentable. Si todos trabajamos juntos conseguiremos un mundo mucho mejor».

Del Bosque llegó a las once de la mañana a Potes procedente de Ávila, conduciendo su propio coche. Fue recibido en el Hotel Pico Valdecoro por el alcalde de Potes;el exalcalde de Santander y ex presidente del Racing, Manuel Huerta (madridista hasta la médula) y el presidente de honor de El Diario Montañés, Mariano Linares, que fue Orujero Mayor en el año 1998. Y, con ellos, entre otros vecinos y cofrades, desfiló hasta el salón de plenos, donde el consejero de Turismo, Francisco Martín, le dedicó cálidas palabras: «Es un hombre de muchas virtudes, de gran humanidad y fraternidad, un hombre sosegado, una leyenda del deporte, el mejor entrenador de mundo y de la historia. Una personalidad afable que quiere a España. El mejor reconocimiento que obtiene es que la gente le quiere y le da las gracias por la calle por haberles hecho feliz con el fútbol».

En el salón de plenos estaba también el director de la Vuelta Ciclista a España, Javier Guillén, invitado por el alcalde de Potes a la fiesta que llenó ayer, en un día radiante de sol y excelente temperatura, todos los bares, restaurantes y las terrazas de la villa.

El alcalde dio la bienvenida a Del Bosque «en nombre de toda la familia lebaniega, cuyo trabajo es dar a conocer Liébana y el orujo por todo el mundo», dijo.

Es la primera vez que Del Bosque pisaba Potes y se mostró sorprendido por que una villa entre montañas tenga tanta arquitectura destacable y tanta historia, por el calor de los lebaniegos y los cántabros y por un hecho importante: Liébana guarda el mayor trozo de la cruz de Cristo, en el santuario de Santo Toribio. Este año se celebra el Año Jubilar, en el que miles de personas han pasado por la Puerta delPerdón y besado el Lignum Crucis. En el libro de honor de firmas de los Orujeros Mayores, Del Bosque dejó escrito «a mis amigos de Potes, en el día del nombramiento como Orujero Mayor».

El exentrenador no es hombre de muchas palabras, pero lo que dice lo siente. Saludó con educación a cuantos le saludaron y pidieron fotos y nadie salió defraudado. Lo dijeron cuanto se acercaron a él. «Es igual que en la tele. Igual de agradable y educado. Pero más alto». Lo que siempre fue durante sus años de seleccionador nacional y entrenador del Real Madrid: un referente como persona y como profesional, con quien la selección ganó el Mundial en 2010 y dos Eurocopas.

En la fiesta lebaniega estuvieron presentes las cofradías del Orujo de Liébana, del Queso de Cantabria, el Zapico y el Respigo, de Laredo. Y los alcaldes de Cabezón de Liébana, Jesús Fuente; Pesaguero, Vicente Vélez; Peñarrubia, Secundino Caso; Cillorigo de Liébana, Jesús Cuevas y Tresviso, Javier Campo, y el primer teniente de alcalde de Camaleño, José Antonio Fernández. Entre las autoridades regionales que no se quisieron perder la fiesta estuvo el delegado del Gobierno en Cantabria, Samuel Ruiz; la vicepresidenta del Gobierno, Eva Díaz Tezanos, y la presidenta del Parlamento, Dolores Gorostiaga.

El presidente Miguel Ángel Revilla, acudió a saludar a Del Bosque con el que charló de fútbol y participó en parte del desfile por las calles. También estuvo el veterano periodista Luis del Olmo, Orujero Mayor en 2002, que ayer ofreció un recital de poesía en Santo Toribio y acudió a Potes felicitar a Del Bosque. Animaron las actividades las Asociación del Traje Regional de Torrelavega y de Cabezón de la Sal; la asociación cultural L’ Escañetu y la Ronda Salines de Cabezón de la Sal.

Tras la proclamación del orujero mayor ante cientos de personas en una gran carpa montada en La Serna, y el encendido de la alquitara oficial a cargo de Del Bosque en la caseta del Ayuntamiento, la comitiva recorrió las nueve casetas de los empresarios orujeros lebaniegos a concurso en la cata ciega para elegir el mejor orujo del año y se celebró la anual degustación popular de aguardiente, licores y cremas.

La fiesta continuará hoy, domingo, con actuaciones musicales, degustaciones de orujo y el encendido de las alquitaras desde primera hora de la mañana. En esta jornada se dará a conocer el ganador de la Alquitara de Oro, después de haberse celebrado la cata del jurado especializado desarrollada en la noche de ayer. Es el trofeo mas deseado por los productores, el certificado de calidad del mejor orujo lebaniego, motivo de orgullo y aval para la comercialización del licor. Nueve empresas orujeras lebaniegas participan en el concurso, que el año pasado fue ganado por Picos de Cabariezo, que también se alzó con el trofeo en los años 2012 y 2013.