Una senda une ya las dos ermitas del entorno de Santo Toribio

Después de ascender por las escaleras metálicas desde la ermita de San Miguel, la pronunciada pendiente del terreno hasta la ermita de Santa Catalina se ha reforzado con escalones y con la instalación de una cuerda entre las encinas, en ambos lados de la senda, con la que se puede ayudar al paseante.

Además, se ha procedido a desbrozar todo el área del mirador de San Miguel desde donde se da vista a la villa de Potes, con el fondo de la sierra de Peña Sagra, una zona que hasta ahora la presencia de vegetación impedía observar. La actuación ha sido realizada por la empresa de Teodulio Guardo Martín y ha supuesto una inversión de 8.250 euros.

El presidente de la Mancomunidad de Liébana y Peñarrubia y alcalde de Potes, Javier Gómez, señaló ayer que «con este acceso entre las dos ermitas conseguimos dar seguridad al recorrido entre las mismas y que todas las personas interesadas en realizar esta ruta puedan disfrutar de este magnífico entorno en condiciones seguras y de comodidad». A juicio de Gómez, «se trata de una actuación muy demandada, ya que si bien existía un recorrido corto, que iba desde el monasterio de Santo Toribio hasta la Cueva Santa y desde allí a Santa Catalina y San Miguel, era un acceso muy dificultoso y no estaba en condiciones de ser utilizado».

Para el alcalde de Camaleño, Óscar Casares, esta actuación «era una necesidad para poder completar esta ruta histórica entre el monasterio de Santo Toribio y las ermitas de San Miguel y de Santa Catalina, ya que la senda llevaba ya bastantes años sin poder ser utilizada». Asegura que este paso va a permitir «completar un circuito cultural y paisajístico, junto con el mirador sobre el valle de Camaleño y Picos de Europa, que será muy importante tanto para el Ayuntamiento de Camaleño como para el conjunto de la comarca de Liébana».