Los alevines de trucha repueblan el río Nansa

Alrededor de 5.600 alevines de trucha han sido soltados esta mañana en en el río Nansa, en Celucos (Rionansa), con el fin de ayudar a la repoblación natural de la especie. Llega así a su final el proceso que la Sociedad Cántabra de Fomento de la Caza y Pesca inició en otoño pasado con el desove de los reproductores.

En palabras del presidente de la Sociedad, Manuel Borbolla, lo que se pretende con este proyecto, que alcanza su cuarto año de andadura, es "recuperar la especie y mejorar la cantidad de salmones y truchas que hay en el río».

El encargado de soltar los alevines en el punto elegido ha sido el consejero de Medio Ambiente, Guillermo Blanco, quien ha mostrado el contenido del cubo que portaba en sus manos a los asistentes, los niños del colegio Valle de Polaciones, y los integrantes de la Asociación Cultivando Inclusión.

Al acto han asistido también representantes de entidades que colaboran en el proyecto. Por parte del Banco Santander, Manuel Iturbe; los coordinadores de agrupación de Acciona, Mercedes Rubiera y Ramón García, y el presidente de la Junta Vecinal de Celucos, Enrique Pérez.

Previamente a la suelta, los escolares han recibido unas nociones básicas del proceso, «porque aunque sean niños que provienen del medio rural, no conocen mucho el sistema». Con anterioridad, también han tenido la oportunidad de visitar las instalaciones los alumnos de Celucos, los escolares de Rionansa y los de Val de San Vicente.

Las huevas llegaron a Celucos en fase de incubación. «Cuando nos traen las huevas, tenemos que recepcionarlas, tenerlas en los tanques de incubación los primeros 25 días, y luego, cuando nacen de los huevos, pasarlas a los tanques de incubación», ha indicado Borbolla.

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