Alfoz encarga un estudio arqueológico para salvar el proyecto de la Cueva de las Aguas

Al alcalde de Alfoz de LLoredo, Enrique Bretones, la respuesta negativa del Servicio de Patrimonio sobre su intención de crear un parque temático y una vía ferrata en torno a la cueva de las aguas de Novales, no le ha amilanado en absoluto. Es más, el regidor ha puesto toda la carne en el asador y contratado «a un arqueólogo de reconocido prestigio» para que realice un exhaustivo estudio sobre el terreno y redacte un informe con los resultados. Documento que irá a parar a manos de la institución que ha denegado la propuesta municipal, «que le tendrá que dar otra vuelta». El independiente realizó estas declaraciones tras el encuentro mantenido con el consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Luis Martínez Abad, que se comprometió a «favorecer el potencial de Alfoz con proyectos de calidad, que pongan en valor su rico patrimonio». Precisamente es este el objetivo con el que Bretones encargó la redacción del proyecto en torno a la cueva, en el que invirtió 9.000 euros y para el que, como ya ha dejado claro en varias ocasiones, cuenta con todos los informes sectoriales favorables. Excepto con el no de Patrimonio, una mala sorpresa de la que el alcalde tuvo conocimiento hace apenas tres semanas. Sobre este asunto, en la reunión mantenida entre ambos políticos, tan solo se dijo que «se analizarían las fórmulas para poner en valor este recurso», sin especificar nada más. Fue Bretones el que ayer ofreció algunos datos sobre su hoja de ruta. «El objetivo es que estimen nuestra alegación y se pueda instalar una ruta de senderos –además de una tirolina– y una vía ferrata. El plan redactado por los técnicos hablaba de «la construcción de un itinerario deportivo en altura y de un puente tibetano, que dotará al conjunto de un atractivo singular para los visitantes». Todo ello, defiende el regidor, se ubicaría en los aledaños de la cavidad, aprovechando las formaciones rocosas del paisaje, y no incidiría en su conservación. «Espero que podamos demostrarlo», adelantó Bretones. Cualquier técnico que sepa del tema «podrá ver que se trata de una actuación respetuosa, en la que los elementos se mimetizan con el medio en el que se ubicarán».

El plan diseñado por el Ayuntamiento tiene un coste aproximado de 281.000 euros «y no supone ningún perjuicio para la cueva; todo esto es ridículo», expresa el regidor. Bretones defiende una actuación que, a su juicio, «pone en valor el patrimonio natural del municipio y que incrementará el turismo en un lugar poco conocido». El regidor espera que la institución que regula el patrimonio cambie de opinión y «nos permita ejecutar una intervención que va a resultar beneficiosa para todos», adelantó Bretones.

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