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El Ayuntamiento de Comillas mantuvo hoy en vilo a los implicados en la protesta por la tala de dos de los cinco castaños centenarios de la plaza del Corro Campíos. Los tuvo pendientes hasta las cinco de la tarde, cuando el Consistorio anunció, al fin, que tras reunirse con los vecinos que han paralizado la corta, solicitará una segunda consulta técnica sobre el estado de los árboles. Lo harán, dicen, «con el objetivo de mantener un clima de diálogo y mesura en el pueblo». A la vez, advierten, «se continuará con la poda de la totalidad de los ejemplares para eliminar ramas enfermas y muertas y reducir las posibilidades de que ocurra un accidente».
El encuentro entre los políticos y la plataforma de afectados se produjo después de un fin de semana tenso, en el que un centenar de personas mostró su oposición a la tala prevista por el Ayuntamiento.
La polémica comenzó hace una semana, cuando los técnicos de la empresa Arbocan se disponían a eliminar el primero de los dos castaños que serán sustituidos. Los concejales del PP y algunos vecinos se interpusieron y lograron paralizar la actuación. La escena se repitió en los siguientes días en términos similares y de momento los castaños siguen en pie.De hecho, todo parece indicar que seguirán. Por ahora. Desde elAyuntamiento explicaron ayer, de nuevo, que la intención es realizar podas progresivas en los ejemplares, así como aplicar tratamientos fungicidas e instalar elementos de seguridad. Menos en dos árboles, que serán sustituidos «porque representan un gran riesgo». Los vigorosos castaños, aseguran, «se pueden caer».
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