Las caravanas siguen llegando masivamente a Oyambre mientras se ultima su regulación

A pesar de que con la autocaravana se puede llegar a los lugares más recónditos y solitarios, lo cierto es que al final muchos de ellos eligen los más atractivos paisajísticamente y los que ofrecen la posibilidad de disfrutar de las mejores playas junto a actividades complementarias como el surf.

Precisamente por ello, la costa del Parque NaturalS de Oyambre se ha convertido en uno de los principales focos de atracción para los que practican el 'caravaning'. Tan solo hay que recorrer en estos días la carretera que une la playa de Oyambre con San Vicente de la Barquera para comprobar la presencia de centenares de caravanas en muchas de sus fincas, a veces espacios de uso libre, pero la mayor parte de ellos concentrados en terrenos que cuentan con la autorización de la dirección del Parque Natural de Oyambre para ser utilizados como aparcamiento, con el objetivo de dar servicio a las playas. De esta forma ahora se dispone de miles de plazas para aparcar, lo que ha favorecido en los últimos años un incremento notable de bañistas a lo largo de los más de cinco kilómetros que ocupan los arenales de Merón y Oyambre.

La realidad es que a lo largo de los últimos años se ha ido generando una situación que para algunos se ha convertido en una opción de negocio gracias a los ingresos que consiguen por permitir aparcar en sus fincas pero que desde otra perspectiva se ve como un problema por la masificación que se está registrando, lo que genera impactos ambientales y, sobre todo, en el paisaje.

Lo cierto es que a día de hoy y a pesar de la demanda existente, no se ha dado una correcta respuesta a esta compleja situación, ya que a pesar de ese masivo uso que se realiza de las fincas como zonas de estacionamiento por parte de las autocaravanas, no se contaba hasta hace poco con ningun área específica especialmente habilitada para ello, al margen de los campings que existen en la zona.

En concreto, el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) del Parque de Oyambre no permitía la creación de estos equipamientos en las zonas de uso limitado o compatible, es decir, las situadas en las zonas más próximas a la costa o en zonas de especial interés ambiental o paisajístico, precisamente en las que se concentran la mayoría de las autocaravanas.

Sin embargo, sí se autorizaban en las zonas catalogadas de uso general, pero lo cierto es que en todo el tiempo que lleva en vigor no se presentó ninguna iniciativa para construirlas al considerar que por su ubicación resulta poco atractivas para los usuarios.

Ante esta realidad los responsables del Parque de Oyambre aprobaron la pasada primavera una modificación del PORN para autorizar, con ciertas limitaciones, la creación de áreas de servicio y de acogida para las autocaravanas en las zonas catalogadas como de Uso Limitado y en la de Uso Compatible de dicho espacio protegido, con el objetivo de poner fin a lo que consideran «aparcamiento indiscriminado de las autocaravanas».

En el nuevo texto del PORN se refleja de una manera muy genérica la posible autorización para instalar las nuevas infraestructuras. En concreto, se señala que «las áreas de servicio para autocaravanas se contemplan en terrenos con características morfológicas que permitan la actividad sin necesidad de generar importantes movimientos de tierra y que no se encuentren en zonas de elevada exposición visual» por lo que claramente quedará en manos de los informes técnicos posteriores la posible aprobación o no de los proyectos si, según sus características, cumplen con dichas premisas.

En la nueva normativa tampoco se concreta el número máximo de plazas para las autocaravanas que se ofertarán, señalando que «vendrán fijadas en función de la demanda existente y de la capacidad de carga del Espacio Natural Protegido». Está claro, tan solo con ver el uso que actualmente se hace, que la demanda es muy elevada, lo que no está tan claro o al menos hasta el momento no se ha fijado, es cuál es la capacidad de carga que se considera idónea por parte de los actuales responsables del Parque de Oyambre.

Muchos de los propietarios de los terrenos que en los últimos años han recibido autorización para utilizarlos como aparcamientos provisionales en la temporada de verano han mostrado su interés por presentar proyectos para transformar sus actuales terrenos en áreas de servicio para autocaravanas. Pero en bastantes de esos casos, por las características morfológicas de los terrenos, con fuertes pendientes, y por el posible impacto visual,, no cumplirían con los criterios inicialmente fijados.

En concreto, en la última reunión del Patronato del Parque Natural de Oyambre celebrada en junio se planteó la posibilidad de reducir la actual oferta de aparcamientos y establecer zonas en las que no se autorizara este uso «ante el incremento paulatino del uso de estos espacios en los últimos tiempos, el uso indebido de los mismos y el incremento del riesgo de impacto ambiental y paisajístico para la zona».

Entre las propuestas planteadas por la Dirección del Parque se señaló el «no autorizar parcelas de aparcamiento al norte de la carretera CA-236 con el fin de salvaguardar las zonas más próximas a línea de costa, en zonas como el cabo de Oyambre y el entorno del Pájaro Amarillo».También se planteó marcar una distancia desde la línea de costa.

Claramente con estas propuestas algunos de los propietarios de los terrenos que actualmente se están utilizando como aparcamiento de vehículos y autocaravanas no podrán seguir con esta actividad.