Comillas incrementa su alumbrado navideño, con una inversión de más de 12.000 euros

«Existen además diversos formatos –aclara Velarde-, como las luces de gran tamaño que se colocan frente al Palacio de Sobrellano, y los arcos de la calle Marqués de Comillas». El Ayuntamiento potencia siempre la iluminación en las calles del casco urbano, donde se concentra la mayoría de comerciantes y establecimientos de hostelería, aunque no todos. «Este año volveremos a colocar las guirnaldas en la calle de los Arzobispos y en la plaza de la Fuente Tres Caños», adelanta el concejal. De iluminar esta parte del centro de la villa modernista se encarga una empresa especializada que el Ayuntamiento contrata para tal fin. La misma que coloca el famoso árbol de Navidad en la plaza de la Constitución. «Estamos estudiando la posibilidad de ubicarlo en el centro de la plaza –otros años se ha situado en el lateral izquierdo- para que su presencia sea compatible con las obras que se están llevando a cabo en la fachada de uno de los edificios de esta calle», explica el concejal. Por lo demás, la regulación del tráfico rodado en la plaza de la Constitución continuará siendo como hasta ahora: permitido circular y aparcar entre semana y prohibido los fines de semana.

En total, la inversión este año «sobrepasa los 12.000 euros, unos mil más que el año pasado», según adelantó Velarde. El problema de Comillas es que «los barrios están muy dispersos, por lo que la iluminación no se arregla colocando cuatro luces en las calles más importantes, como puede suceder en otros municipios». Con respecto a las críticas que pueda despertar la iniciativa que colocar luces navideñas durante la pandemia, el concejal responde rotundo: «consideramos que ya estamos viviendo un año bastante complicado como para que además los niños y sus familias no puedan disfrutar de un poco de alegría con las luces de Navidad», expresa. También supone un revulsivo para los comerciantes. «Son ellos mismos quienes nos han animado a iluminar las calles porque así la gente también quizá se anima a comprar», opina el concejal.

Comillas participó hace dos años en la campaña de la marca de bombones Ferrero Rocher para ser el pueblo mejor iluminado de España. Quedó finalista pero terminó perdiendo frente a la localidad zamorana de Puebla de Sanabria.