Un nuevo acceso al bosque de las secuoyas

A la zona, aún agreste y sin apenas 'domesticar' -de momento tan solo hay un panel informativo- se llega tras recorrer los 750 metros de pista forestal que separan la carretera nacional del nuevo aparcamiento, que cuenta con unas cincuenta plazas. La adecuación del terreno se ha llevado a cabo respetando el entorno -no se ha asfaltado- y teniendo en cuenta la riqueza del hábitat natural. «Una pasarela al paraíso», resumió ayer acertadamente el consejero de Desarrollo Rural, Guillermo Blanco, que acudió a inaugurar la estructura acompañado del director general de Biodiversidad, Medio Ambiente y Cambio Climático, Antonio Lucio, y del alcalde de Cabezón, Víctor Manuel Reinoso, así como del concejal de Obras, Héctor Vélez. Blanco explicó que la alternativa «solucionará el problema que existe con los vehículos que aparcan fuera de las áreas habilitadas». Y quizá disminuya la gran cantidad de visitantes que cruza la carretera en puntos desprovistos de pasos de cebra tras dejar sus vehículos en lugares no habilitados, en las inmediaciones del complejo o al otro lado de la vía. En época estival se viven situaciones de verdadero riesgo con el incremento del tráfico rodado y el intenso ir y venir de personas en medio de la carretera.

Por su parte, el alcalde especificó que mediante este paso «adaptado -recordó- se puede acceder también a las seis rutas alternativas que completan el recinto». Con respecto a si se va a llevar a cabo alguna otra medida para controlar la masificación del parque, el consejero aseguró que «el espacio puede albergar a las personas que lo visitan hoy en día» y recordó que el problema «es de civismo».