Fomento mejora el vial de acceso al pueblo de Cires

El valle de Lamasón es por su situación geográfica, fuera de las principales rutas de comunicación de la región, uno de los más desconocidos de Cantabria. Situado entre el valle del Nansa y la ruta que conecta con el valle lebaniego, ha sufrido y aún sigue padeciendo importantes problemas por sus deficientes infraestructuras.

Una situación que precisamente ahora se pretende revertir con importantes actuaciones de la Consejería de Fomento, algunas de las cuales ya están en marcha y otras están siendo proyectadas con el compromiso de ejecutarse a lo largo de esta legislatura. En la actualidad se está acometiendo la obra de mejora de la plataforma, drenaje y seguridad vial en el acceso oeste al pueblo de Cires desde la carretera autonómica CA-282, donde conecta con el pueblo de La Fuente. Esta actuación, que ejecuta la empresa Gestión de Infraestructura Viales S.L (Gicsa), supone una inversión de 402.376 euros, estando previsto que esté finalizada en el mes de marzo, lo que supondrá una importante mejora en las comunicaciones del pequeño pueblo de Cires.

Los trabajos que vienen ejecutándose a lo largo de los dos últimos meses consisten en la demolición del pavimento que se encontraba en un pésimo estado para el saneamiento de la calzada. También se actuará sobre los blandones, incluyendo trabajos de fresado.

Para el desarrollo de la obra se está acondicionando el terreno por el que discurre el vial mediante su limpieza y desbroce. También se está actuando en el drenaje, en concreto en los 17 caños transversales existentes, ampliando una gran parte de ellos mediante tuberías de mayor tamaño. El proyecto contempla recrecer los pozos y arquetas para adecuarlos a la nueva rasante e instalar una cuneta longitudinal de hormigón a lo largo de toda la traza del vial, incluyendo la instalación de pasos salva cunetas en los accesos a las fincas.

Para la mejora de la plataforma se realizará el extendido y compactado de zahorras y de una capa de aglomerado bituminoso en caliente de regularización, con un espesor medio aproximado de 5 centímetros de árido calizo y un acabado de capa de rodadura, previa realización de riegos bituminosos de imprimación y adherencia. Finalmente se repondrá y mejorará la señalización horizontal y vertical de la carretera y se instalarán barreras de seguridad en diversos puntos.

Pero la actuación más necesaria y esperada de las que se proyectan ejecutar en el valle de Lamasón es la mejora de su principal acceso, que conecta la zona con el valle del Nansa a través del desfiladero de Sobrelapeña hacia la Venta Fresnedo. Se trata de un vial que, por su características, limita el paso de vehículos de grandes dimensiones, obligando a los conductores en muchas ocasiones a realizar un largo recorrido por Puentenansa.

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