Fomento pondrá fin a los vertidos de la depuradora de Carmona

Desde Fomento están dispuestos a buscar una solución. La Consejería «se encuentra en fase de solicitud de ofertas para la redacción del proyecto», explicaron. Los técnicos «ya han realizado un estudio sobre el alcance de la actuación y su posible coste -probablemente se trate de un contrato menor (48.000 euros)-. Una vez se licite, el plazo de redacción del proyecto «será de un mes». «En primer lugar habrá que hacer labores de desbroce y vaciado de la depuradora, así como acondicionar la instalación eléctrica e instalar un aireador para que no se sobrecargue». Después, «se revisarán los equipos, que llevan mucho tiempo sin funcionar, y hay que dejarlos en perfectas condiciones», concretaron desde el Ejecutivo. La intención «es poner en marcha la instalación, pero los procesos administrativos llevan su tiempo». En cualquier caso, desde Fomento esperan que el asunto esté solucionado «a comienzos del próximo año».

Después, será «MARE la que se ocupe de su gestión y mantenimiento». Según Fomento, el problema con la depuradora de Carmona se da también en otros municipios. «Hemos hablado con varios alcaldes que nos han transmitido una situación parecida», explicaron. «Esta circunstancia se da porque el coste de mantener este tipo de instalaciones es muy elevado para los ayuntamientos», por eso una vez se encuentre una solución, «será MARE la que se ocupe de la gestión de todas aquellas depuradoras que actualmente no funcionan».

La depuradora le ha costado al Ayuntamiento de Cabuérniga unos cuatro mil euros, como consecuencia de las multas impuestas por el organismo hidráulico. Durante varios años, los vertidos han ido a parar al río, provocando malos olores en el pueblo y despertando la preocupación de los vecinos.

La «buena sintonía» con el nuevo Gobierno Regional ha desbloqueado un asunto que viene de lejos. En este sentido, la regidora ha mantenido varias reuniones en determinadas consejerías para abordar cuestiones «que no fueron atendidas por el anterior Gobierno», un desencuentro que Fernández atribuía a su ser del PP.