Secciones
Servicios
Destacamos
Arturo Nebreda, el ganadero de Bielva que vio arder la cuadra con sus tudancas dentro y a las pocas semanas se encontró con otra parte de sus animales, que estaban en otra estabulación, muertos como consecuencia de una inyección de veneno en la yugular, ha ... sido ahora víctima directa de un ataque por la espalda que le ha producido varias lesiones que le mantienen desde hace unos días alejado del trabajo.
Entre tanto, ha denunciado otras fechorías, como el ensañamiento con sus tractores. Y también antes de salir a la luz pública, había denunciado este tipo de actos, tras haber encontrado dañada su maquinaria agrícola y, en varias ocasiones, su coche, y haber sufrido un robo en su casa, precisamente del dinero de su boda que tenía guardado.
La última denuncia la presentó en la madrugada del sábado en el cuartel de San Vicente de la Barquera, aportando el parte de lesiones emitido por el Hospital de Sierrallana, donde le diagnosticaron una contractura cervical, por la que se encuentra estos días en situación de incapacidad temporal, encerrado en casa, y utilizando un collarín.
Los hechos denunciados tuvieron lugar en torno a las nueve de la noche en el barrio Sabornin, de Bielva. Nebreda se encontraba en una finca de su propiedad, realizando labores de cuidado de unos animales de su propiedad, «cuando sin mediar palabra ni oportunidad ninguna recibió el impacto por la parte trasera de la cabeza con algún objeto contundente, tras lo que cayó al suelo y perdió la conciencia, casi al instante».
Así lo explica la denuncia, a la que ha tenido acceso este periódico. Preguntado por si se percató de la presencia de algún individuo o vehículo cercano, Nebreda manifestó que no, que no observó nada, «únicamente que antes de perder el conocimiento escuchó a dos personas hablar, por lo que cree que eran dos los agresores». Y sobre si sospecha de alguien, respondió que de nadie en concreto, si bien deduce de nuevo que «debe ser alguien de su círculo o que conoce sus costumbres y horarios».
Además de las lesiones sufridas, en la denuncia también se reflejan varios daños en su furgoneta: rotura de la luna delantera, paragolpes delanteros y faros. Los daños fueron inspeccionados por la patrulla de San Vicente de la Barquera, que se personó comisionada por la Central Operativa de Servicios.
La Guardia Civil de Cantabria detuvo en abril a un vecino del ganadero como presunto autor de los numerosos sabotajes, que empezaron a trascender en noviembre, con el incendio de la cuadra donde Nebreda tenía sus tudancas, desde hacía un día, después de varios meses fuera de la estabulación.
Al detenido se le atribuía la comisión de delitos de daños contra la flora, fauna y animales domésticos. El balance de los ataques incluía la muerte de 36 cabezas de ganado, el incendio de la cabaña y diversos daños en maquinaria agrícola, que traducido en dinero, ascendería a unos 72.000 euros.
Del primer hecho que trascendió a los medios, la Guardia Civil tuvo conocimiento el 26 de noviembre, cuando ardió la cabaña y murieron 23 vacas tudancas, de las que, además, 17 estaban preñadas. También ardieron 800 fardos de hierba. En menos de un mes, entre el 16 y el 17 de diciembre, el mismo ganadero sufrió la muerte de 13 reses de menos de un año de vida y otras dos, que sobrevivieron, sufrieron diferentes lesiones. Todos estos animales, que estaban vendidos y con el compromiso de entregarse en fechas próximas, se encontraban en otra finca de Bielva. De las indagaciones realizadas se supone que los terneros murieron por una inyección de algún tipo de sustancia venenosa. Los sucesos mantienen en vilo al pueblo de Bielva.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.