
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Los ataques del lobo mantienen en vilo a los ganaderos de la zona de Cabezón de la Sal y de una parte de la ... comarca occidental, algunos de los cuales desde hace varias semanas han visto disminuir a sus cabañas. Las cabras de Manuel Obregón, Titi, que pastaban en terrenos pertenecientes a los municipios de la faja mancomunada entre Cabezón de la Sal y Alfoz de Lloredo, están entre las últimas víctimas que se ha cobrado el depredador. Con los ocho animales que le faltan a este ganadero desde la mañana del viernes, cuando registró el mayor número de bajas, ya suma, según declara, un total de «18 desaparecidos» en doce días, pero sólo ha encontrado los restos de varios de los ejemplares de momento.
También en Casar de Periedo (Cabezón de la Sal), a un golpe de vista desde la cuadra de Titi, otro ganadero perdió otras dos reses hace también dos semanas. «Y aquello lo tiene cerrado, las ovejas estaban en el prado», relata el afectado.
Titi lleva toda su vida cuidando ganado y sobre esta labor no se le escapa nada, pero afirma que no supo cómo actuar ante tal situación, nunca vivida en la zona. Y, a día de hoy, sigue dándole vueltas a qué es exactamente lo que ha ocurrido y a cómo ha podido pasar. «Yo lo único que sé es que me han faltado 18 cabras, he visto dos matadas, los restos; otra la ha encontrado un guarda que está buscando por ahí», relata.
«No sabía qué tenía que hacer y el viernes me dijo mi primo que tenía que llamar al 112 para que nos pusieran con el Seprona. Nos contestó ese guarda, que nos dijo que venía por Golbardo, que había subido por la finca de La Estrada y había encontrado una cabra en el cortafuegos. Y entonces, ya le dije que yo había visto otras y nos comentó que guardásemos los crotales», relata.
Tanto éste como otros ganaderos locales llevan semanas preocupados por los recurrentes ataques. A Titi, ahora le quedan 28 cabras y ya no duerme pensando en qué pasará con ellas.
El alcalde pedáneo de La Busta, Julián López, acudió ayer al lugar al enterarse de la noticia. «En los años que tiene la gente mayor, nunca ha habido lobos, nunca se han visto por esta zona, y ahora sí que empieza ser un problema, un problema gordo», lamentó el regidor.
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