Miles de alevines de salmón vuelven a poblar la cuenca media y alta del Nansa

Tras seis décadas sin que los salmones pudiesen superar la barrera de 20 metros de altura de la presa de Palombera ya se vislumbra un futuro esperanzador para que esta especie vuelva a recuperar el que fue su hábitat natural con el deseo por parte de todos los implicados para que el Nansa vuelva a ser uno de los mejores ríos salmoneros de España y Europa.

Hace unos pocos meses, tras una inversión millonaria, Acciona puso en marcha un ascensor en la presa de Palombera para facilitar el paso de los salmones por lo que hasta ese momento era una barrera infranqueable.

Tras ese paso decisivo, la actuación de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente en colaboración con la Asociación Cántabra de Fomento y Caza, ha permitido que desde ayer 13.000 alevines de salmones, de unos 5 centímetros de tamaño, pueblen el río y contribuyan a repoblar el Nansa en las próximas temporadas.

Tras el trabajo realizado primero en el Centro Ictiológico de Arredondo y después en el Centro de Alevinaje instalado junto al pueblo de Cosío, en la mañana de ayer el propio consejero, Guillermo Blanco, acompañado por el subdirector general de Medio Natural, Ángel Serdio, junto a varios agentes del Medio Natural, participaron en la suelta de esos primeros 13.000 alevines de salmones que se han conseguido tras haber capturado los primeros ejemplares que utilizaron el ascensor de la presa.

El acto, que ha supuesto un hito importante para el futuro del Nansa, contó con la participación del presidente de la Asociación Cántabra de Fomento de Caza y Pesca, Manuel Borbolla, y de varios de sus miembros, que han cuidado todo el proceso de desarrollo de los alevines en el centro que gestionan en Cosio, así como los alcaldes de varios municipios de la comarca, como los de Rionansa, Tudanca, Lamasón y el presidente de la Junta Vecinal de Cosío que también ha colaborado en el proyecto. Todos ellos han destacado la importancia de estas actuaciones para recuperar la población de salmones en el río Nansa.

«Cantabria es una región con una gran tradición salmonera que apuesta de manera decidida por extender la presencia del salmón por toda la región para que todos los ríos de la vertiente cantábrica recuperen su condición de salmoneros», ha subrayado Guillermo Blanco, quien ha confiado en que el Centro de Alevinaje instalado de manera provisional en Cosío con excelentes resultados, contribuirá de manera decidida a conservar la especie del salmón, «un excelente indicador de la calidad fluvial de Cantabria».

El consejero ha asegurado que su departamento va a seguir impulsando iniciativas como ésta, que ayuden a mejorar la calidad de vida de los peces y contribuir de manera decidida a la lucha contra el cambio climático y que también contribuyen con el objetivo de que el medio rural recupere sus valiosos recursos naturales para luchar contra el abandono y la despoblación de sus territorios.