El monumento al Pájaro Amarillo regresa a Oyambre en el mes de mayo

El popular monumento al Pájaro Amarillo podría regresar a su lugar de origen, en la playa de Oyambre, en mayo. De esta forma, los numerosos bañistas que frecuentan este arenal volverán a contemplar este símbolo, testigo de uno de los episodios más intrépidos de la historia de la aviación, el próximo verano. El monolito fue retirado, piedra a piedra, en el año 2010, ante el peligro que existía de derrumbe a causa de los efectos de los fuertes temporales.

Al menos éste ha sido el compromiso que le trasladó el consejero de Medio Rural, Pesca y Alimentación, Jesús Oria, al alcalde de San Vicente de la Barquera, Dionisio Luguera, y al concejal de Medio Ambiente, Martín Chaves, en un encuentro en el que abordaron las diferentes propuestas presentadas por el Consistorio a la dirección del Parque Natural de Oyambre.

El regreso del monolito en recuerdo del Pájaro Amarillo ha sido una demanda que, de manera inalterable, se ha sostenido en el tiempo por distintos colectivos. Sin embargo, a pesar de que la actuación no es costosa y técnicamente tampoco es complicada, ha necesitado de ocho años para llevarse a cabo, debido a problemas de diferente índole que lo han ido retrasando.

El monumento que antes se encontraba situado sobre el mismo arenal, ahora se proyecta instalarlo en el mismo punto, pero en tierra firme, junto al camino que conecta la playa con la carretera. De esta manera, se evitará nuevamente los problemas provocados por el mar.

El monumento, obra del entonces joven escultor Jesús Otero, se desmontó numerando sus piedras, permaneciendo desde entonces en un almacén del Ayuntamiento de San Vicente.

El monumento al Pájaro Amarillo se inauguró el 8 de septiembre de 1929. En esa fecha se conmemoró el épico aterrizaje del avión Bernard 191 GR que, en junio de ese mismo año, protagonizaron los pilotos franceses Armand Lotti, Assolant y Lefreve. En su vuelo de New Jersey a París tuvieron que utilizar la playa de Oyambre como improvisada pista de aterrizaje, al quedarse sin combustible por el exceso de peso, a causa de la presencia del polizón Arthur Shreiber, que también quería ser participe de aquella hazaña.

Aquel curioso incidente provocó que el vuelo del avión conocido popularmente como el Pajaro Amarillo, por su llamativo color, se convirtiese en el primero en cruzar el Atlántico que tomó tierra española, haciendo que Oyambre fuese protagonista de una de las primeras grandes gestas de la aviación.

En la reunión, Jesús Oria también informó al alcalde barquereño de que las obras para instalar el Centro de Oyambre en la Casa Pozo se iniciarán en el mes de septiembre.