La oficina de turismo de Cabezón se viste de Navidad

El proceso de creación no ha sido precisamente fácil «y no habría podido llevarse a cabo sin la participación de los alumnos y las alumnas de la asociación», destacó Claudia, que aboga porque la juventud sea una parte activa del proceso y tenga oportunidad de expresarse. En este caso lo ha hecho a través del arte. «Primero hicimos un boceto, luego un plan de coordinación, adquirimos el material, lo lijamos, lo pintamos y lo montamos». Todo es reciclado. «Son piezas desmontables que se pueden embalar y volver a emplear en otra ocasión, como objetos de decoración, así que digamos que la casa se ha disfrazado, pero con algo bonito», aclaró Ruiz.

«La idea era captar al público infantil y la galleta de jengibre es algo que está en el imaginario de todos los niños y niñas, ya que sale en cuentos y en películas, por lo que nos pareció que podía ser divertido», apuntó Escalante. Para la directora de la oficina de turismo, contar con una casa de colores en el centro del municipio «atraerá al turismo, que en estas fechas es más familiar, y dinamizará el comercio, además de alegrar las calles y darle más vida al pueblo». La casa permanecerá vestida de Navidad hasta después del día de Reyes.