Secciones
Servicios
Destacamos
LUCÍA ALCOLEA
Sábado, 13 de noviembre 2021, 07:30
Una estructura metálica une ya las localidades de Virgen de la Peña, en Cabezón de la Sal, y Villanueva de la Peña, en Mazcuerras. El esqueleto del nuevo puente que Obras Públicas está levantando sobre el río Saja en una de las puertas de entrada ... al valle de Cabuérniga destaca sobre el fondo del paisaje. La imagen de la imponente pasarela, que será atravesada tanto por vehículos como por peatones, impacta estos días más que nunca, después de tres años de espera con las máquinas trabajando sin que se apreciasen resultados tan palpables como hasta ahora. Desde la Consejería confirmaron esta semana que la obra «avanza con total normalidad» -está previsto que el puente entre en funcionamiento la próxima primavera-. La siguiente fase consistirá en «dotarlo de los cables necesarios para su sujeción».
La plataforma tendrá 13 metros de ancho y una acera a cada lado de 1,85 metros. Medirá noventa metros de longitud y ya no será necesario ralentizar el tráfico para que puedan circular dos vehículos a la vez en sentido contrario, como sucede en el viejo puente, que será demolido una vez hayan finalizado las labores de construcción del actual. Su derribo, más allá de los vínculos afectivos que puedan tener algunos vecinos, supondrá finalizar con los problemas viales que se producen diariamente en uno de los puntos negros de la región, ya que la estrechez de la carretera obliga a los conductores a extremar la precaución. Apenas se dispone además de espacio para el tránsito de los viandantes.
Aunque esta forma de ir de un núcleo rural a otro ya se ha convertido en costumbre, los vecinos son conscientes de la necesidad que existe de levantar un puente nuevo, ya que incluso se han llegado a producir destrozos en la ermita situada en Villanueva de la Peña debido al tráfico de camiones. Sin embargo, el colectivo de Ecologistas en Acción manifestó su rechazo al proyecto de construir una plataforma que consideran tendrá un impacto ambiental «irreversible», según denunciaron al comienzo de las obras.
La carretera en la que se encuentra la construcción es uno de los puntos de entrada al valle de Cabuérniga, por lo que suele estar muy frecuentada -también por ciclistas, sobre todo los fines de semana-, motivo por el que resulta de vital importancia reforzar la seguridad. Así lo admitió también el consejero de Obras Públicas en la visita que realizó hace unas semanas al municipio cabezonense para comprobar el estado de los trabajos. Gochicoa habló de una «solución fundamental para los habitantes no solo de Cabezón y Mazcuerras, sino también de los ayuntamientos limítrofes». El político señaló que con el puente «se libera un espacio peligroso donde tenían lugar frecuentes accidentes».
La zona es además objeto de inundaciones cuando se producen las avenidas del río Saja como consecuencia de las fuertes lluvias. De hecho, la plataforma desde la que se dirigían los trabajos se vio afectada por la crecida del cauce tras el temporal que asoló Cantabria, y especialmente esta zona, en enero de 2019. A este respecto, el consejero anunció que la nueva solución «permitirá mejorar hidráulicamente el cauce y por tanto hacer frente a las inundaciones que se producen con frecuencia en la zona».
Los vecinos de los pueblos afectados ya se han acostumbrado a convivir con el ruido de las máquinas, que apenas han estado paradas a lo largo de los tres últimos años. Los propietarios del restaurante Los Abetos, situado junto al puente en Virgen de la Peña, han visto cómo un muro de piedra cubría parte de la fachada de su establecimiento. Todos están deseando que la obra termine y vuelva a escucharse el río.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.