Ruente cubrirá la pista deportiva para ampliar sus usos

La actuación «se ideó en la legislatura que acaba de finalizar –quiso aclarar el regidor– y el objetivo es disponer de un espacio cubierto y ventilado, amplio, donde se puedan realizar diversas actividades». Desde ferias a conciertos, además de por supuesto partidos de fútbol. Un espacio multiusos situado en el corazón de Ruente, que dará servicio a todos sus habitantes.

Así lo explica el alcalde: «La pista se encuentra en una zona que es núcleo de atracción, porque se celebran las ferias ganaderas y agroalimentarias, así como los concursos de ganado». También albergará actuaciones musicales y actividades culturales. «La versatilidad del espacio va a ser tremenda», proyecta Díaz. Aunque la pista tiene al menos veinte años, la obra contempla tan solo instalar la cubierta, «a la que también se dotará de iluminación, incluidas luces de colores para los espectáculos que lo precisen, y de un sistema de megafonía adecuado». «El espacio contará con todas las comodidades para que los usuarios de las nuevas tecnologías se puedan conectar», añade.

El Consistorio ya cuenta «con los permisos sectoriales» y con la autorización de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC), porque la pista está próxima al río Saja. Sin embargo, la fecha para comenzar los trabajos no está nada clara. Al menos hasta que no se aclare quién gobernará y dónde. «Lo primero es que se asuman los nuevos cargos en la Mancomunidad Saja-Nansa –que preside el ahora edil popular– para después poder dar salida al Plan de Sostenibilidad Turística, que a su vez también depende de la Dirección General de Turismo», especifica Díaz. Así que por lo pronto, habrá que esperar a que se constituyan los ayuntamientos, algo que sucederá el próximo 17 de junio.

Por otro lado, el Ayuntamiento de Ruente cuenta ya con una serie de infografías en las que se puede observar cómo quedaría la pista polideportiva una vez cubierta. «Un lugar moderno, accesible, preparado para las inclemencias meteorológicas», define. Además, se espera que estéticamente la instalación vaya a juego con el entorno y no desentone con las construcciones de alrededor, ni rompa la armonía rural.

Aún no hay plazos, pero la idea parece que está bastante clara. Al menos en la cabeza del alcalde. «Es una necesidad que vamos a tratar de cubrir por el bienestar de los vecinos», subraya.