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Las voces y la luz han sido este viernes los grandes protagonistas de los actos de clausura del Año Jubilar Lebaniego en este intenso fin de semana. El lugar elegido fue el considerado kilómetro '0' del Camino Lebaniego, es decir la iglesia de Santa María ... de los Ángeles de San Vicente de la Barquera, punto que miles de peregrinos a lo largo de todo el último año han tomado como punto de partida para llegar hasta el Monasterio de Santo Toribio de Liébana, centro del Año Santo, y 'hogar' del Lignum Crucis.
Precisamente las voces de los vecinos que forman parte de los pueblos por los que discurre ese camino de manera principal, junto a otros procedentes de diferentes puntos de Cantabria, se unieron para formar un singular coro integrado por cerca de un centenar de componentes, desde niños de apenas 4 años hasta aquellos que ya cumplieron los 80. «¡Qué mejor manera de despedir este año tan especial que con el júbilo compartido!», señalaron los organizadores de la Fundación Camino Lebaniego, un júbilo que mostraron los cantores a través de un cuidado y amplio repertorio. A lo largo de los últimos ocho sábados, los componentes de Las Voces del Camino han visto alentada su creatividad de la mano de Esteban Sanz Vélez, algo que hicieron resonar con toda su fuerza en el interior del templo barquereño, en un concierto seguido por numerosas personas que pudieron disfrutar con esta singular propuesta.
El coro, como estaba previsto, se creó para ser efímero, para ensalzar los valores del patrimonio cultural del Camino Lebaniego, en el que la música brilló con luz propia. Y fue precisamente la luz la que continuó con el protagonismo de los actos desarrollados en la noche barquereña del kilómetro '0' de Camino a través de una espectacular instalación artística que hizo brillar más que nunca el exterior de la iglesia de Santa María de los Ángeles, que vio cómo su fachada se llegó a cubrir de todos los colores imaginables.
Medio centenar de potentes focos led, estratégicamente situados para iluminar todos los recovecos de la fachada del templo barquereño, se instalaron para deslumbrar con diez secuencias de dos minutos cada una para contemplarlo con esas distintas tonalidades. Al mismo tiempo otra instalación formada por otros 24 focos situados en el Mirador del Peregrino lanzaron a lo alto del cielo barquereño un espectacular rayo que alcanzó los tres kilómetros de altura, por lo que pudo ser visible desde numerosos puntos de Cantabria y de Asturias. En otro momento, ese rayo se inclinaba hacia los Picos de Europa, marcando el recorrido del Camino Lebaniego. La dirección artística de este espectáculo lumínico, que volverá a repetirse a partir de las 21.30 horas de este sábado, corre a cargo del francés Jonas Bidault, que contó con el apoyo de un amplio equipo para el que se utilizó material que ha llegado a la villa especialmente desde Bélgica.
Los actos programados para celebrar la clausura de la presente edición del Año Jubilar Lebaniego continuarán con un amplio y variado programa que se desarrollarán en Potes este sábado. Por una parte, se celebrará el 'Domus Dei, Domus Populi', a través de un itinerario de luz monumental para destacar los cuatro elementos históricos del patrimonio arquitectónico religioso de la capital lebaniega, además de un 'videomapping' en la Torre del Infantado y una charla sobre 'Mil años de gastronomía'.
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