El semáforo de la carretera de Oyambre funciona de nuevo

Sin embargo, este problema puntual ha vuelto a sacar a la luz la anómala situación que se viene produciendo en esta carretera enclavada en pleno corazón del Parque Natural de Oyambre desde hace ya más de 12 años, como es el tener que contar con un semáforo para regular el tráfico. Teniendo en cuenta que se trata de una vía que a lo largo de casi todo el año registra poco tránsito, por el estrechamiento que se produce de la calzada en un punto de apenas un centenar de metros, al no haberse podido culminar las obras de ampliación ejecutadas en el resto de la carretera CA-131. Una interrupción que tuvo que ver con la denuncia realizada por el colectivo Ecologistas en Acción al considerar que no se habían cumplido todos los trámites ambientales en un punto en el que era necesario ensanchar un pequeño puente que atraviesa el riachuelo Merón, denuncia que fue avalada por diferentes sentencias judiciales.

A día de hoy, la ampliación del puente permanece ejecutada pero sin entrar en funcionamiento, sin haberse cumplido los trámites requeridos por los tribunales para legalizarlo o, en su caso, tener que derribarlo. Esta situación hace que el tráfico a lo largo de estos doce años se vea interrumpido en cada uno de los sentidos cada minuto y quince segundos, eso a lo largo de todo el año, sin que en la mayor parte de las ocasiones se encuentren vehículos en ambas direcciones, provocando el malestar de los usuarios habituales, especialmente los vecinos de la pedanía de Los Llaos.

Ante las quejas provocadas en los últimos días, los afectados confían en que los nuevos responsables de las carreteras autonómicas tomen cartas en el asunto y resuelvan esta anómala situación.