Los viejos almacenillos del puerto de San Vicente serán historia a principios de 2023

Esta era una actuación que venía siendo demandada tanto por la Cofradía de Pescadores, con el objetivo de dar un nuevo uso a esa parcela portuaria, como por el propio Ayuntamiento y los vecinos en general por la pésima imagen que ofrece el deteriorado edificio situado en el paseo de La Barquera, uno de los viales más importantes de la villa. Además, esta zona es también lugar de paso en una de las principales rutas turísticas de San Vicente.

La Dirección General de Obras Hidráulicas y Puertos, propietaria del edificio, descartó en su momento su restauración debido al avanzado estado de degradación en el que se encontraba dicho pabellón, que es el más antiguo del puerto barquereño, construido a mediados del pasado siglo y que contaba con una veintena de almacenes que han sido utilizados, durante más de seis décadas, para guardar las artes y pertrechos de los armadores de embarcaciones pesqueras.

La demolición, que podría iniciarse a lo largo del próximo mes de enero, se abordará por medios mecánicos. Es decir por el sistema de colapso con empuje de máquina retroexcavadora. Tras los trabajos previos para anular y retirar las líneas eléctricas dispuestas en su fachada y la colocación de las medidas de protección se realizará la demolición propiamente dicha y la retirada de los escombros al vertedero autorizado de materiales inertes.

Una vez recogidos todos los escombros se acometerá la urbanización del área que quede liberada mediante el asfaltado de una superficie aproximada de 1.000 metros cuadrados, la implantación de redes de servicios afectados y la construcción de la red de drenaje necesaria para la evacuación de las aguas de escorrentía superficial. Dicha parcela, según se contempla en el proyecto, quedará para uso y servicios varios de los pescadores.

El Plan de Puertos contemplaba construir en ese solar una nueva nave multiusos que también era una demanda de la Cofradía, un edificio diáfano de dos plantas, para destinar la superior a la reparación de las redes, trabajos que actualmente se tienen que realizar muchas veces a la intemperie por falta de espacio adecuado. Otra parte de dicha nave en proyecto se utilizaría para acoger las redes y aparejos que ahora mismo se encuentra dispersas al aire libre por el puerto.

Sin embargo, los responsables de Puertos de Cantabria quieren esperar para definir el proyecto definitivo de la nave a construir a conocer el fallo del recurso presentado ante el Tribunal Supremo sobre el proyecto del puerto deportivo, porque en caso de que finalmente pudiese ejecutarse el mismo también se contemplaría que dicho espacio acogiese servicios y equipamientos para darle usos complementarios a la nueva instalación portuaria.